Finalmente ha ocurrido: Windows 10 ya no es el sistema operativo de ordenador más usado del mundo. Ese honor ahora lo tiene Windows 11, el sistema más moderno de Microsoft que ha conseguido lo que parecía imposible.
StatCounter ha actualizado las cifras de uso de Windows para julio de 2025, y el 'sorpasso' finalmente ha ocurrido. Windows 11 ahora tiene una cuota de mercado del 52%, la primera vez que supera la barrera psicológica del 50%.
Eso no significa que Windows 10 haya desaparecido de repente; el sistema aún se encuentra en un 44% de ordenadores según StatCounter, y es poco probable que esa cifra vaya a caer mucho más este año.
Al fin y al cabo, por mucho que Microsoft quiera que los usuarios tiren su ordenador a la basura y se compren uno nuevo con Windows 11, en la práctica mucha gente seguirá usando Windows 10, porque no puede, o no quiere, dar el salto al nuevo sistema.
Aún así, se trata de una victoria histórica para Microsoft, que demuestra que la polémica estrategia que adoptó el año pasado ha dado sus frutos; desde hace meses, los usuarios de Windows 10 están siendo atosigados con ventanas emergentes y mensajes constantes.
Microsoft Surface con Windows 10
Además, Microsoft ha tomado algunas decisiones que han sido criticadas por entusiastas y expertos, como actualizaciones de Windows 10 que empeoran el sistema, eliminando funciones que ya tenía el sistema, para fomentar la migración a Windows 11.
Pero nos guste o no, es innegable que Microsoft ha conseguido algo que no habíamos visto desde los tiempos de Windows 95: que un nuevo sistema sea adoptado tan rápidamente en apenas cuatro años desde su lanzamiento.
Sin embargo, Microsoft no puede relajarse aún; no en vano, un 44% de ordenadores con Windows 10 representa cientos de millones de personas que aún usan un sistema que quedará obsoleto muy pronto, con el fin de soporte el próximo mes de octubre.
De hecho, en España Microsoft tiene poco que celebrar; según datos de StatCounter, la cuota de mercado de Windows 11 sorprendentemente está cayendo, y Windows 10 sigue muy fuerte representando un 55,23% del mercado.
Que países como España se resistan tanto a dar el salto a Windows 11 es un gran problema para una Microsoft que quiere evitar que se repita la historia de Windows XP, cuando tuvo que seguir manteniendo el sistema hasta una década después de su "final".
Con Windows 10, la compañía ya ha tenido que anunciar una extensión de su programa ESU de soporte extendido para usuarios convencionales, aunque poniéndoles ciertas condiciones como subir sus datos a la nube de OneDrive o usar sus productos como Bing.
Sin embargo, ya hay voces que piden que este programa se extienda más años, además de reducir los requisitos de Windows 11, para permitir que más usuarios puedan dar el salto con el ordenador que ya tienen, algo que Microsoft ha intentado evitar.