El juicio por posible monopolio contra Google que está en marcha en los Estados Unidos sigue dando mucho que hablar, por la gran cantidad de revelaciones sobre la manera en la que los gigantes tecnológicos compiten entre sí. Por ejemplo, gracias a este juicio se ha descubierto que Apple considera a Android como un método de rastreo masivo.
La estrategia del Departamento de Justicia consiste en usar estas revelaciones para intentar demostrar que Google está abusando de su posición dominante; y que los fabricantes no pueden competir de igual a igual contra el gigante de Internet por las tácticas y acuerdos secretos que usa.
En concreto, el problema está en la enorme cantidad de dinero que Google usa para que móviles y apps usen su buscador por defecto; como, por ejemplo, los miles de millones de dólares que Apple recibe cada año para instalar el buscador de Google en todos los móviles iPhone que vende.
Google se explica
Para contrarrestar este ataque, Google también está revelando sus propios secretos; pero lo está haciendo con la esperanza de demostrar que sus decisiones son necesarias únicamente por lo dura que es la competencia en el sector. En palabras de Jamie Rosenberg, que testificó ayer en el juicio al haber entrado en Google en el 2010 como parte del equipo de Android y Google Play, la competencia “es tan intensa como parece”.
Rosenberg fue el que confirmó una práctica que, hasta ahora, era algo desconocida: que Google paga directamente a fabricantes como Samsung y a operadoras como Verizon para luchar contra el iPhone. El empleado de Google afirmó que estos pagos tienen como objetivo ayudar a las compañías a “promocionar y mantener los productos de Android”; por ejemplo, para que sigan ofreciendo actualizaciones de seguridad. Sin embargo, también confesó que no sabía si las compañías realmente usan el dinero para eso; ya que Google no impone ningún tipo de condición al entregarles el dinero.
Aunque Rosenberg habla de estos pagos como “mecanismos de refuerzo”, los abogados del Departamento de Justicia alegaron que Google es perfectamente capaz de mantener el sistema Android por si sola, gracias en parte a los 12.000 millones de dólares de beneficio que le da la Google Play Store. Pero Rosenberg negó esta sugerencia, afirmando que Google Play no tendría tanto éxito si no fuera precisamente por el éxito del buscador.
Por lo tanto, es evidente que el Departamento de Justicia quiere dar a entender que Google está pagando a estas compañías para manipular el mercado. Lo curioso es que Apple también recibe pagos de Google, pese a que en teoría es su gran rival; la explicación de los abogados es que Google prefiere mantener su buscador en los iPhone, en vez de permitir que Apple cree su propio buscador o llegue a un acuerdo con un rival como Bing.