El contenido viral se define de esta manera por lo rápido que se propaga en las redes sociales y aplicaciones de mensajería. Lo habitual es buscar títulos gancho e inverosímiles para que, con solo leer el principio de una noticia, lo compartamos automáticamente y sin confirmarla. Esto también se aplica a los sorteos y a los regalos, algo demasiado extendido en Facebook o WhatsApp, por poner dos ejemplos.

Ponte en situación. Imagina que ves un anuncio de alguien que regala móviles porque ha comprado demasiado stock. Suelen ser móviles de alta gama y el texto siempre viene acompañado de una foto en la que se ve una pila de smartphones esperando dueño. Suele pedirse la suscripción a la página y que la noticia se comparta en pos de fomentar la citada viralidad. Pero cuidado, porque hay ocasiones en las que hay que completar otros pasos peliagudos, como registrar el número de móvil en una web, algo que no debes hacer jamás.

Las esrafas en la web están a la orden del día. Hay que estar atentos para que no nos engañen y, también, alertar a nuestros amigos y familiares cuando comparten un sorteo, regalo o concurso sospechoso. Cuanto antes se corte la distribución de los timos menos cantidad de personas se verá alcanzada.

Los regalos y sorteos existen, pero no es lo más habitual

La semana pasada recibíamos el correo de una lectora alertándonos sobre este tema, el de los falsos sorteos. En el mail (gracias, Nagore) nos ponía sobre la pista de una compra de móviles de alta gama (un Galaxy S9+) por solo 1 euro. El motivo era un presunto error de Orange por el cual estaban vendiendo los móviles a ese precio solo a sus trabajadores, pero que cualquiera podía beneficiarse. La mecánica, estilo del anuncio y el precio ridículo para un móvil que vale más de 900 euros es un indicativo claro de estafa.

Los estafadores harán el gancho lo más atractivo posible. Buen móvil, precio ridículo…

Como decíamos, los sorteos y regalos existen, nosotros mismos realizamos concursos similares de vez en cuando. De ahí que una norma para fiarse o no de un regalo o sorteo sea que este provenga de una página fiable. Si te llega un aviso por WhatsApp, ves el anuncio en una página de Facebook que no conoces, lo lees en un post de Instagram de un usuario que carece de reputación… seguramente sea un engaño.

La principal motivación para proceder con ese estilo de timos es la creación de una cuenta social con relevancia de manera rápida. Los sorteos y regalos hacen que el contador de seguidores suba como la espuma sin ningún tipo de esfuerzo. Y una vez conseguido un buen número de «fans» solo hay que cambiarle el nombre a la cuenta y listo: los dueños consiguen repercusión social y pueden desde vender la cuenta fraudulenta a colocar publicidad para generar ingresos.

Lo anterior es lo más común, pero podría darse el caso de que existiera una intención de generar un auténtico fraude. Hay concursos que obligan a introducir el número de teléfono para así suscribir al usuario a servicios Premium de SMS. También hay falsas promociones que utilizan aplicaciones sociales para así robar la mayor cantidad de datos personales posible.

Hay otro punto que debemos tener en cuenta: a menudo piden ingresos en cuenta antes de realizar el envío del supuesto móvil; dinero que desaparece sin que a cambio obtengamos ningún producto (o uno diferente del esperado). Nuestra recomendación es que no accedas a este tipo de compras por muy jugoso que sea el precio. Existen demasiadas probabilidades de que te quedes sin dinero.

Extrema la precaución y nunca te fíes si el móvil es de la gama más alta

No todos los concursos, sorteos y regalos son falsos, pero sí que hay una enorme cantidad de ellos que resultan un fraude. Pueden hacerte perder el tiempo, darte ilusiones o que te lleves a engaño, pero también resulta posible que pierdas dinero si te dejas llevar, por mínima que sea la cantidad.

Lo mejor es cortar de raíz los sorteos virales y las cuentas que los utilizan. Jamás compartas este tipo de anuncios, alerta a quien los haya compartido contigo y denuncia en las plataformas sociales donde se están distribuyendo las falsas promociones. Cuanto más hagamos por cortar su viralidad menos personas caerán en sus redes.