Hoy hablamos de Does Not Conmute, un juego de conducción que a pesar de no ser precisamente nuevo, no es demasiado conocido. Un juego que parte de una idea muy original, y que destaca por su apartado gráfico y por su estilo de juego único.

Does Not Conmute mezcla conducción y viajes en el tiempo a lo loco

¿Es posible mezclar conducción y estrategia en un mismo juego? En Mediocre games creen que si, y lo hacen con Does Not Conmute, un juego que a pesar de llevar bastante en el mercado, sigue mereciendo mucho la pena.

Nos encontramos en un barrio sencillo de los años 70, y en vista aérea encarnaremos a varios ciudadanos, donde cada uno tiene como objetivo llegar a un punto concreto. El comienzo es sencillo, ya que la calle está vacía, pero poco a poco comenzará a complicarse la cosa.

En cada nivel tendremos que llevar a unos quince conductores a su destino, pero con un pequeño factor extra. Cada nuevo conductor que tengamos que dirigir estará en el mismo marco temporal que los anteriores. El juego irá repitiendo todas nuestras rutas, haciendo que poco a poco la calle se vaya convirtiendo en un caos.

Es aquí donde entra el factor estrategia, ya que si conducimos y planificamos mal nuestras rutas, lo más probable es que en los últimos conductores de cada nivel acabemos teniendo un accidente. Además tendremos que superar los niveles en un margen de tiempo, lo que añade un punto de dificultad extra.

Does Not Conmute es un juego completamente gratuito y sin anuncios. Únicamente nos ofrece la posibilidad de pagar 3.29 euros por la posibilidad de poder tener puntos de guardado entre nivel y nivel, teniendo que empezar desde el principio en cada nueva partida si no pasamos por caja. Pagues o no, es un juego que merece muchísimo la pena para los amantes de la conducción y la estrategia.