Que levante la mano quien alguna vez, por diversos motivos, no ha buscado algún tema relacionado con la salud en Google. Sintomas o remedios para algún mal que les aqueja, como un dolor en el pecho o el costado que puede acabar siendo gases, un dolor de cabeza y dolor de cuello y así cien mil veces más.

La información médica de Google serán tarjetas con los síntomas, los tratamientos… y también advirtiendo si esa patología requiere del diagnóstico de un médico

Es bastante probable que acabes encontrándote con una página de diseño del Pleistoceno o en un hilo de Yahoo Respuestas (si, ese foro en el que te puedes encontrar cosas tan disparatadas como alguien que pregunta que si siendo alérgica al gluten se puede consumir cocaína).

Google no ha pasado por alto la tendencia de los usuarios a buscar datos sobre enfermedades y ahora ofrecerá información exprés en sus resultados. Al  buscar una dolencia o una información, en la aplicación de búsqueda aparecerán diferentes tarjetas cómo las que vemos en la parte superior del post en la que se darán datos sobre los síntomas, las franjas de edad a las que más se sufren, el tratamiento…

La información médica de Google no es una consulta: el autodiagnóstico en internet

 

Un detalle importante es que Google no quiere que te autodignostiques. Sus tarjetas incluyen avisos cuando una dolencia o una enfermedad requieren de un diagnóstico médico y ofrece un listado del tipo de profesional o especialista al que puedes dirigirte.

Esto es muy loable por parte del buscador, sin embargo, se corre gran peligro, como en el caso de las páginas webs y foros que muchos declinen ir al médico tras quedarse tranquilos ‘leyendo algo en internet’.

Un experimento con 250 estudiantes a los que se les pidió imaginar que sentían ciertos síntomas conllevo que la mayoría de ellos creían que tenían gripe porcina en lugar de gripe corriente

Desde la propia Google lo advierten: «esta información no es un consejo médico» e insta a quien crea que padece alguna enfermedad a que se ponga en contacto con su centro sanitario.

La mayoría de los autodiagnósticos pueden conllevar errores graves en internet: un experimento con 250 estudiantes a los que se les pidió imaginar que sentían ciertos síntomas conllevo que la mayoría de ellos creían que tenían gripe porcina en lugar de gripe corriente.

¿De dónde salen la información médica de Google?

De momento, esta funcionalidad solo está activa en Estados Unidos, pero es de presuponer que pronto estará en otros países. Tal y como explica el buscador en su página web, se ha habilitado un espacio para que se reporten errores en los datos en la información que se muestra. ¿De dónde sale la información? Según Google es una combinación de algoritmos y profesionales médicos.

Primero, el buscador recopila información de «sitios web de calidad» y luego equipos humanos hacen la criba, lo comprueban y crean los efectos visuales. La información será tratada como una búsqueda más y podrás borrarla desde las opciones de búsqueda e historial.

El filón de Google y la sanidad: Predecir el avance de la gripe

Las búsquedas sobre salud en Google si han servido para algo: predecir el avance de la gripe casi en tiempo real, superando así la eficacia de los instrumentos utilizados por la Administración. En Estados Unidos se han hecho múltiples experimentos en este aspecto con grandes resultados gracias al ‘Big Data’.

El último ejemplo ha sido un nuevo modelo, desarrollado por investigadores de la Universidad de Harvard, entre otros, utiliza información epidemiológica, estadística y datos de búsqueda sobre información médica de Google. Bautizado como ARGOS, es capaz de predecir los brotes de esta enfermedad hasta una o dos semanas antes.

Esta y otras soluciones pueden ayudar mucho: sabiendo con antelación cómo se va a expandir la enfermedad, se pueden mejorar la toma de decisiones como la distribución de personal o los recursos hospitalarios.