El mercado de las tabletas se ha ralentizadlo en España cayendo entre un 7 y un 8% durante el presente 2015, así lo ha desvelado Eduardo Rodriguez, directivo de Samsung España, durante la presentación de la Tab A en la Feria del Libro que se celebra en el Parque del Retiro de Madrid, de la cual la marca coreana es partner tecnológico.

No se trata de un fenómeno nuevo ni exclusivo de España, sino más bien de carácter global. 2014 se cerró con una caída del 3,2% a nivel mundial. El primer cuatrimestre de 2015 ha arrancado con una caída del 35% con respecto al último trimestre de 2014 y un 15% de la tasa interanual, según Digitimes.

A lo largo de 2014 se vendieron en nuestro país 2.700.000 tabletas, una cifra que con el actual ritmo de ventas no se alcanzará en 2015. Rodríguez cree que hasta el momento los dispositivos más asequibles no han terminado de alcanzar las expectativas de los usuarios, por lo que después de dos o tres meses de uso relativamente intenso, lo abandonan progresivamente debido a esa experiencia insuficiente.

¿Fin del formato de las 7 pulgadas?

Durante la presentación se ha incidido es que el mercado de los tablets asequibles parece haber desechado ya el formato de las siete pulgadas (cuya época dorada se reflejo en la Nexus 7) y que el tamaño que parece tener más recorrido, en esta gama media, es entre las 9 y diez pulgadas. En el caso de las ocho pulgadas, ha sostenido Rodríguez, se está dando el fenómeno que principalmente los clientes se van a opciones premium.

En el caso de la Tab A, Rodríguez ha explicado que se enmarca dentro de un reordenamiento de catálogo, como ya han hecho con los terminales, y ha destacado de este dispositivo que ofrece la posibilidad de una tableta con stylus a un precio asequible.

El ciclo de vida de las tabletas, más largo que el de los smartphones

Otro factor que cree que puede haber influido en la caída de las ventas es la bajada de precios de los portátiles y convertibles con Windows 8, que algunos usuarios ven como una compra más versátil que una tableta. A esto se suma que el ciclo de renovación de los terminales es más largo. Si en el caso de los smartphones el usuario está dispuesto a renovar su terminal cada 18 meses o cada dos años, en el caso de las tabletas los usuarios alargan su vida hasta los tres o cuatro años, por lo que tras el boom inicial del lanzamiento de estos dispositivos, el mercado ha reducido su crecimiento.

El boom inicial de las tabletas se dio gracias al gran éxito de los smartphones muchos usuarios se acostumbraron a una informática más sencilla, por lo que en el momento en el que se lanzan las tabletas, lo ven como una opción viable para sustituir su viejo ordenador. Además todo esto coincidió con el lanzamiento de Windows 8, un sistema que aspiraba a rejuvenecer el PC pero que se topó con el rechazo de muchos usuarios, algo de lo que Microsoft ha tomado nota y parece haber corregido de cara a Windows 10.

La madre de todos los mercados resultó no serlo

Para muchos, las tablets eran las llamadas a acabar con el mercado del PC, mientras que otros pensaban que únicamente estábamos ante una moda pasajera. Las enormes ventas iniciales demuestran que hay mercado de sobra para estos dispositivos, si bien es verdad que quizá no sea la mina de plata que muchos esperaban que fuera mientras se les ponían los ojos como el símbolo del dólar -Steve Jobs pensó que sería la madre de todos los mercados-.

Lo más probable es que el mercado de las tabletas acabe por estabilizarse en un punto medio, sin canibalizar otros mercados y sin desaparecer como una estrella fugaz, y los fabricantes que esperaban que cada dos años nos cambiásemos el dispositivo tendrán que darnos motivos reales para ello o pensar nuevos inventos para sacarnos nuestros escasos euros.