Proyectos indies en el terreno de los smartphones no hemos visto demasiados. El motivo es sencillo, es un sector caro en el que el desarrollo del hardware requiere una inversión increíblemente alta.

Sin embargo, de vez en cuando surgen algunas ideas que podríamos calificar de originales. O locas, locas también.

Es el caso del BoringPhone, una propuesta que llega desde Nueva Zelanda y que promete darnos el equilibrio perfecto entre un smartphone avanzado y un teléfono simple convencional.

Buscando el punto medio

La idea de este proyecto de KickStarter es obtener un teléfono que nos permita estar localizados por GPS, que nos deje hacer fotos con buena calidad, enviar SMS, llamar y usar algunas herramientas útiles pero no nos quite más tiempo de la cuenta.

Para ello se capa cualquier aplicación de juegos o redes sociales, además de las tiendas de aplicaciones.

Se ha pensado para esas personas que quieren estar localizables y no se conforman con un móvil básico, o esas que creen que pasan demasiado tiempo perdido frente al smartphone.

Un Xiaomi Mi A1 de base

El proyecto es en sí mismo un sistema operativo que corre encima de un móvil preexistente. En este caso el móvil elegido es el Xiaomi Mi A1 de 32 GB, que se ha vendido en la página de KickStarter por 199 dólares neozelandeses, unos 120 euros. Hay otros packs que incluyen accesorios y elementos varios y que cuestan más dinero. Actualmente el pack más barato es de unos 175 euros ya que el más económico se agotó rápidamente.

Es importante que los propios creadores del proyecto avisan que si debido a la demanda se agotara su stock de modelos del Mi A1, recurrirían a otra base de similares prestaciones, aunque el sistema operativo que han desarrollado seria el mismo.

Es importante remarcar que hay elementos del hardware que no funcionan, como la cámara con zoom que incorpora el Mi A1.

Una idea curiosa, pero quizás excesiva

La idea de poder tener un terminal potente que no nos distraiga pero se a útil es interesante. No obstante, es algo que podemos hacer nosotros simplemente desinstalando aplicaciones y usando ciertos launchers.

¿Merece la pena comprar un nuevo smartphone para ello?