En móviles emblemáticos analizamos con retrospectiva algunos de los móviles Android que marcaron historia en nuestro sistema operativo favorito. Una sección que nos demuestra cuánto hemos cambiado.

Móviles emblemáticos de Android: Yotaphone 2

A día de hoy, los fabricantes de dispositivos móviles siguen una tendencia clara. Arriesgar poco, tomar lo que funciona y olvidarse de experimentos locos. Puede parecer una estrategia un poco cobarde, pero si lo miramos con perspectiva, es normal que cada vez veamos menos locuras en el mercado.

Más importante que innovar es hacer un producto sólido, que cumpla con nuestras necesidades del día a día. Es a partir de ahí que un fabricante puede comenzar a ofrecer valor añadido para justificar precios mayores. La historia nos ha enseñado que hacerlo al revés no acaba funcionando.

Una historia que nos demuestra que no todos los finales acaban bien es la del Yotaphone 2. Se trata de un móvil que tanto en el papel como en la práctica resultaba ser fantástico, pero que tuvo serias dificultades para trinufar. Parece que la compañía apostará por una tercera generación tres años después. ¿Sabrá el Yotaphone 3 aprender de los errores del dos?

Un repaso a sus especificaciones

  • Pantalla AMOLED de 5 pulgadas, resolución FullHD.
  • Pantalla trasera de tinta electrónica de 4,7 pulgadas con resolución 960×540 pixeles.
  • Cristal Gorilla Glass 3, tanto en la parte frontal como trasera.
  • Procesador Qualcomm Snapdragon 800
  • 2GB de memoria RAM.
  • 32GB de almacenamiento interno no ampliable.
  • Cámara principal de 8MP con grabación de vídeo 1080p a 30fps.
  • Cámara frontal de 2.1MP
  • Radio FM.
  • LTE Cat4(150/50Mbps) con bandas 800, 1800 y 2600.
  • WiFi a/b/g/n/ac y Bluetooth 4.0, acelerómetro y giroscopio.
  • Carga inalámbrica y soporte para Quickcharge 2.0.
  • Medidas: 144,9 x 69,4 x 9mm.
  • 145 gramos de peso.
  • Batería de 2500mAh.
  • Android 4.4.3 KitKat sin capa de personalización (actualizable a 6.0 Marshmallow).

Doble pantalla, menor consumo

El Yotaphone 2 se trata de un móvil que fue presentado a principios de 2014. Al igual que su predecesor, destacaba por incluir dos pantallas, una en cada lado del teléfono. Su pantalla principal era AMOLED, de 5 pulgadas y resolución fullHD, algo que no es muy sorprendente. La magia se encuentra en su segunda pantalla.

Al final, acabas utilizando la pantalla de tinta electrónica a diario.

La tinta electrónica estuvo de moda en una época en la que las pantallas móviles tenían mucho margen de mejora. Entre sus ventajas nos encontramos una mayor comodidad de lectura (no cansa a la vista) así como una reflectancia nula. Vamos, que con una pantalla de tinta electrónica puedes ponerte a leer a plena luz del sol sin tener ningún tipo de problema.

No solo eso, el consumo también es mucho menor, ya que solo consume batería cuando cambia el contenido mostrado en pantalla, y no necesita iluminación. Tras haber pasado varios meses con el móvil, puedo afirmar que es una ventaja real, y que la tinta electrónica no era un añadido del que te olvidas a la semana de comprarlo. Si te gusta leer o incluso chatear la acabas utilizando con mucha frecuencia.

La idea cada vez convence menos

Si tan buena era la idea de un móvil con doble pantalla. ¿Por qué fracasó? Veamos los principales motivos.

A la hora de vender un producto y tener éxito hay muchos factores que se deben considerar. La innovación es uno de ellos, pero no el único, ya que el objetivo final de esta es ofrecer un valor añadido que haga que tu producto sea mucho más atractivo.

Por otro lado, el precio, la fecha de lanzamiento y lo que ofrezca la competencia en ese lanzamiento son otros factores decisivos. A nivel técnico, el Yotaphone 2 se encontraba a la altura de sus principales rivales (con una peor cámara de fotos, eso si), por lo que la pantalla de tinta electrónica si tenía sentido como atractivo, pero hubo un problema.



Era difícil competir con el OnePlus One.

El precio de salida del Yotaphone 2 fue de 700 euros, un precio considerable teniendo en cuenta su gama, pero bastante elevado si teníamos en cuenta sus rivales. A pesar de ser presentado a comienzos de 2014, no llegó al mercado hasta finales de año, por lo que móviles más interesantes como el Galaxy S5, LG G3 o incluso OnePlus One costaban sustancialmente menos. Marcas que ofrecían o una mejor garantía, o un precio sustancialmente inferior.

Al final, el Yotaphone 2 pasó de ser uno de los móviles más prometedores del 2014 a venderse a precio de coste para vender las unidades que quedaban en los almacenes. El soporte de la compañía tampoco es que fuese brillante, ya que las actualizaciones tardaron bastante en llegar (aunque dado el tamaño de la compañía y que traían nuevas funciones para la pantalla, se podía perdonar).

Aunque no funcionase a nivel comercial, el Yotaphone 2 fue un excelente móvil.

El pasado mes de marzo recibió Android 6.0 Marshmallow (si, Nougat ya llevaba meses en el mercado) y ahí quedó la cosa. Tampoco ha ROMs personalizadas para exprimirlo más. Eso si, fue divertido mientras duró.