Analizamos a fondo el UMI Hammer, un interesante smartphone de gama media con origen chino que presume de resistencia.

UMI es bien conocida entre la enorme lista de fabricantes chinos de smartphones y accesorios para móviles. Hace unos meses hicimos la review del UMI Zero, y en esta ocasión daremos un repaso al UMI Hammer, que, con su nombre, deja clara su resistencia a golpes y caídas de todo tipo, al menos en teoria.

Hardware del UMI Hammer

No estamos ante un modelo de gama alta, sino ante un smartphone con especificaciones medias que ofrece un buen rendimiento a un precio de lo más ajustado (sobre todo si se compra en tiendas online chinas). En concreto, el Hammer monta un panel IPS de 5 pulgadas con resolución HD que ofrece unos colores muy vivos.

En su interior los chinos de UMI vuelven a recurrir a Mediatek como suministrador para sus procesadores que, en este caso tenemos el modelo MTK6732 de cuatro núcleos a 1.5GHz. Le acompañan 2GB de RAM y otros 16GB de almacenamiento interno, que podremos complementar con una tarjeta microSD.

  • Procesador Mediatek MTK6732 Quad-Core, 1.5GHz
  • Pantalla de 5 pulgadas HD IPS
  • Procesador gráfico ARM Mali-T760
  • Batería de 2250 mAh
  • Memoria RAM de 2GB
  • Almacenamiento de 16GB con ranura para microSD hasta 64GB
  • Cámara trasera de 13MP y frontal de 3.2MP
  • Dimensiones: 144 x 71.6 x 7.9mm
  • 168 gramos
  • Conectividad: Dual SIM, WiFi, GPS, Bluetooth 4.0
  • Android 4.4. KitKat

La cámara utiliza un sensor de 13MP con flash LED de doble tono, mientras que la frontal es de 3.2MP (un paso atrás teniendo en cuenta que el Zero incluía un gran sensor de 8MP para amantes de los selfies).

Este modelo vuelve a contar con doble ranura para tarjetas SIM y las opciones clásicas de conectividad. Lo único que no encontramos tan positivo es su software. Llega con Android 4.4. KitKat y no tenemos muchas esperanzas de que se actualice, aunque al menos no tiene prácticamente personalización por parte del fabricante y su rendimiento stock es bastante bueno.

Construcción y diseño

Ocurre cada vez menos, pero hace unos años estábamos acostumbrados a que un terminal de gama baja o simplemente chino, tuviese unos acabados de pena. Este no es el caso del UMI Hammer.

La primera vez que lo tenemos en la mano sorprende lo sólido que es, transmitiendo grandes sensaciones. ¿Por qué? en gran parte por el chasis del teléfono.

Todo el UMI Hammer está rodeado por un marco fabricado en aluminio con un grosor de sólo 4.3 milímetros que, según la compañía ofrece la suficiente resistencia, aunque sin dejar de lado la ligereza. El aluminio no se extiende por todo el cuerpo, sino que sólo está presente en los bordes.

Así la parte trasera es de plástico muy finito y desmontable, lo que nos da acceso a la batería (pudiendo cambiarla) y las ranuras para las tarjetas. Todos los botones físicos, de encendido y volumen, se encuentran en el marco derecho y tienen un buen tacto, aunque también podemos encender la pantalla con el querido doble toque.

Por último, en la parte superior están tanto el conector jack de 3.5 milímetros como el microUSB de carga, una ubicación que no nos termina de convencer, pero al final te acostumbras a ella.

La parte frontal está completamente cubierta por la protección Gorilla Glass 3 y lo que UMI llama “cristal doble”, que en teoría le da una gran resistencia ante golpes y caídas. Es el propio fabricante quien promociona el teléfono a base de martillazos. Los botones bajo la pantalla, por cierto, son capacitivos aunque no nos gusta tanto que no estén retroiluminados.

Pantalla

Como he dicho al comienzo, el Hammer monta una pantalla con un tamaño de 5.0 pulgadas, una diagonal a la que ya estamos más que acostumbrados. Al tratarse de un terminal de gama media prácticamente iguala a sus competidores, con un panel IPS de resolución HD, o lo que es lo mismo 1280×720.

Los ángulos de visión son bastante buenos y apenas se nota el lavado de los colores incluso en ángulos extremos (la firma dice 178º). Los colores son vivos y tiran más a tonos fríos. El brillo máximo es muy alto para usarlo en interiores, aunque en exteriores deja un poco que desear.

UMI ha querido hacer un smartphone resistente, por ello lo ha equipado con una pantalla que ellos llaman “Dual Glass” o de doble cristal, que junto a la capa Gorilla Glass 3 y el aluminio de los marcos la hacen más duradera, en teoría (lo que no quita que un mal golpe acabe con ella, no hay nada indestructible).

Cámara

En este UMI Hammer tenemos un sensor CMOS de cámara de 13MP para la trasera, no conocemos exactamente qué componente es, pero no parece el mismo Sony IMX214 que sí utilizaba el Zero. En este caso su apertura es f/2.2 y los resultados no son extraordinarios pero sí en la media de los de su gama.

Por su parte, la frontal utiliza un sensor de 3.2MP, algo justos para selfies, aunque suficiente para la mayoría de usuarios. Si echamos un vistazo a las fotografías resultantes nos encontramos, por norma general, con colores lavados. En el móvil destacan un poquito más por la reproducción de colores de la pantalla, pero al pasarlas al PC, por ejemplo, necesitamos un poquito más de intensidad.

Esto ocurre principalmente en el modo automático, claro, el que usarán por norma general los usuarios, pero sí es cierto que si jugamos con los valores y las opciones de la app de cámara puede mejorarse.

Así, a plena luz del día y con todo en automático el Hammer tiende a aplicar un alto procesado para aumentar la nitidez, lo que acaba con fotos con más ruido del que deberían. Un ruido que se aprecia más si hacemos zoom. Del mismo modo, conforme va cayendo la luz, el tiempo que emplea para enfocar también es mayor y todavía aparece más ruido. Por su parte, el doble flash LED está ahí, no es una auténtica antorcha, pero puede sacar de un apuro.

Aquí tenéis una galería

Software: KitKat sin personalización

En el apartado de software no tenemos demasiadas sorpresas, bueno sí, que no encontramos ninguna capa del fabricante. UMI ha decidido no volcar sus esfuerzos en crear una capa de personalización que puede rendir mal así que ha optado por meter la versión Stock de Android.

¿La mala noticia? que se trata de Android 4.4 KitKat, una versión ya “anticuada” si estás acostumbrado a Lollipop. Las únicas señas de dispositivo chino las encontramos en el cajón de apps, ya que vienen algunas aplicaciones chinas preinstaladas, pero por suerte se pueden deshabilitar para apartarlas de la vista.

De los 16GB que ofrece el almacenamiento interno (más el extra de la microSD), el usuario se queda con unos 12.5GB para su uso y, por si te lo estabas preguntando, trae Google Play instalado, pero sí deberemos descargar el resto de apps de Google (tipo GMail, Maps y demás).

El rendimiento en el día a día es bueno. No tenemos queja, ya que el terminal se comporta con fluidez y las transiciones son rápidas. En el día a día cumple con cualquier tarea que le pueda pedir un usuario medio, con uso de redes sociales, apps de comunicación, navegación web y algún juego ocasional (no los más exigentes, pero se porta).

Los únicos extras que encontramos a nivel de software están en los Ajustes del teléfono, allí Umi ha metido algunas opciones para gestos fuera de pantalla y el siempre útil “doble toque para despertar”.

Batería

UMI afirma que la batería del Hammer tiene una capacidad de 2250mAh. Con nuestro uso, el detallado anteriormente, se llega al día de duración la mayoría de ocasiones, aunque todo depende del día.

Ha habido jornadas en las que a mitad de tarde el teléfono ya pedía urgentemente una recarga. Además, si no controlamos las conexiones o el brillo veremos bajar el porcentaje con mayor rapidez. Por otra parte, ha habido gran polémica con las baterías del UMI Hammer, ya que muchos usuarios se han quejado de que sus unidades han llegado con una capacidad inferior a la oficial.

La solución pasa por la sustitución de dicha batería de 1750mAh y que llega junto a terminales de determinadas tiendas online, puedes encontrar más información sobre el tema en htcmania.

Conclusión del análisis del UMI Hammer

Con su cuerpo de aluminio, el Umi Hammer presume de solidez y robustez en su construcción, y es probable que no encontremos un terminal así de acabado por su precio, 139 dólares, unos 125 euros al cambio.

La pantalla luce bien, el rendimiento es bueno en el día a día y se siente bien en la mano. Sin embargo también tiene puntos negativos, como el desempeño de la cámara o la batería que llega justa si le damos caña. Además, ahora más que nunca hay una lucha enorme en esa franja de precios y debemos tener en cuenta que hay comprarlo en alguna de las tiendas online (e importarlo).

Por otro lado está el tema de software. Android 4.4 KitKat funciona bien, pero nos arriesgamos y mucho a quedar anclados para siempre en dicha versión, ya que no hay fechas de actualización a Lollipop (y mucho menos a Android M cuando salga), así que sólo se puede confiar en que la comunidad adapte alguna ROM.