Acabamos de terminar el CES en Las Vegas, un año más, y un año más volvemos alucinados con las miles de sorpresas que nos encontramos allí y con la cantidad de furcias por metro cuadrado en la ciudad. Hemos visto bastantes cosas interesantes de todos los fabricantes, pero yo me he quedado particularmente impactado por una de ellas: el nuevo procesador Medfield de Intel.

 

He estado investigando sobre el tema, y la verdad es que me parece una tecnología terriblemente interesante, y un contendiente más que digno para lo que hay, y lo que está por venir, y a continuación os voy a desgranar un poco por qué…

¿Qué es Intel Medfield?

Medfield es una revisión «vitaminada» de los procesadores Atom que todos conocemos en ultraportátiles como los Asus EEE PC o similares. Intel ha cambiado la escala de fabricación de estos para ofrecer soluciones con mejor rendimiento en cuanto a refrigeración y consumo de batería, y además ha integrado soluciones gráficas más potentes que las que podemos encontrar en los antiguos.

Obviamente esto puede parecer insuficiente, pero si os lo detallo un poco más, creo que es bastante posible que entendáis por qué estoy emocionado con esto, o que me mandéis a freir espárragos, en cualquier caso voy a explicarme por si os interesa…

Compatibilidad con dispositivos

Ahora me diréis que si los teclados bluetooth, el Parrot del coche o los mandos de PS3 ya son compatibles, y que si hay miles de cacharros compatibles con vuestro Android, pues si, tenéis razón, pero os quedáis cortos.

Intel Medfield es el primer procesador basado en arquitectura x86 para móviles Android, ¿qué supone esto? Pues sencillo, estamos hablando de un procesador como los de nuestros ordenadores de casa, haciendo correr un sistema que comparte características básicas con cualquier Linux, así que ahora, desde esos dos puntos de inicio, hasta el punto de conectar una impresora WiFi, el NAS que tengamos en casa, acceso a nuestros servidores, etc. Ya había aplicaciones para muchas de estas cosas, la diferencia es que ahora será bastante más fácil hacer que funcionen, o incluso se podrá conseguir desde el propio sistema, imaginad por un momento la cantidad de dispositivos compatibles con vuestros PC que hay, ahora imaginad por un momento que sólo la mitad fueran compatibles con vuestros androides. Abrumador, ¿verdad?

Al rico sandwich de helado…

Hasta la fecha muchos fabricantes siguen sacando versiones de software como Gingerbread, en algunos casos por pura desidia, en otros por el mero hecho de que no funcionan bien en esas arquitecturas (como los teléfonos con arquitecturas ARM6). Sin embargo la arquitectura x86 ha sido soportada de forma extensiva por primera vez en Android Ice Cream Sandwich, por lo que si un fabricante quiere poder aprovechar todo el potencial de un procesador Medfield, la mejor idea que puede tener para aprovecharlo es precisamente utilizar la nueva y flamante plataforma de Google, exprimiendo así todo lo que puede dar de sí este monstruo.

Potencia en estado puro

Hasta ahora, aunque cada vez más hemos visto una progresión bestial en la capacidad de procesamiento de los “cerebros” de nuestros móviles, estos siempre han permanecido un discreto paso por detrás de sus hermanos mayores, los procesadores de PC. Sin embargo ahora, este no es el caso, es un procesador de PC, y como tal está preparado para recibir caña, y por supuesto, Intel lo ha preparado contando con que vamos a dársela, dad por sentado que van a dar lo mejor de sí mismos y que no van a defraudar.

En el video anterior podéis ver como usando el prototipo de Intel mueven video 1080p sin ralentizaciones y sin problemas, gracias al doble procesador de codificación/decodificación integrado (aparte de su gráfica) para el video en alta definición.

Es una apuesta muy fuerte

En otras ocasiones hemos visto como algunos proyectos de Intel, como es el caso de MeeGo, el eterno candidato, el que nunca termina de terminarse, y nunca termina por salir, el que no tiene un smartphone de referencia claro, a pesar de que lo apoyan varios fabricantes además de la propia Intel.

Está claro que el software cuesta un dinero, y que mantenerlo y desarrollarlo requiere de una inversión costosa, pero son unos costes bastante asumibles en términos industriales, e incluso aprovechables monetariamente hablando si algo no sale bien. No obstante, en hardware es otro cantar. Un fabricante no puede lanzar una nueva línea de producción como el Medfield, si no cree que vaya a funcionar. Intel no había entrado hasta ahora en el mercado móvil, y esta claro que su intención es hacerlo por la puerta grande. Han apostado muy fuerte, y están incluso ayudando a aquellos fabricantes que quieren confiar en ellos, para ser los únicos que arriesguen.

En resumen, si me permitís el símil del póker, me parece una apuesta demasiado alta para ser un farol. Intel sabe a lo que está jugando, y no le gusta perder.

Y bueno, esos son mis argumentos, creo que Intel ha puesto mucho en juego aquí como para no estar muy segura de lo que hace, ha traido una maquina potente, ha traido una maquina actual y ha traido una novedad más que interesante para aportar un poco de aire fresco a un mercado que, siendo francos, estaba demasiado tranquilo últimamente…

Y vosotros, ¿qué opináis? ¿hace bien Intel? ¿se van a dar el hostión de su vida?