Bueno, acaba de llegar Septiembre, como siempre, empieza de nuevo la Liga de Futbol (aunque este año casi no empieza…), nos preparamos para la vuelta al cole o al trabajo, y nos alejamos de la calma chicha que reinó durante todo el verano al respecto de las noticias tecnológicas.

No obstante, este año no ha habido parón, o al menos no tanto, pues hemos recibido un bombazo informativo. No se trata de la pérdida de un prototipo del nuevo iPhone en un bar (empieza a convertirse en algo tan tradicional como el posado de verano de Ana Obregón), no. Me estoy refiriendo a una noticia que nos dio la gran G: Google compra Motorola.

La noticia no es lo más fresco, estoy casi seguro de que alguno habíais leído ya algo al respecto, pero quiero añadir un poco de información surgida hace bien poquito gracias a la publicación del sumario de un reciente juicio en el que se ha visto involucrado el gigante californiano. Esta noticia nos revela que entre las estrategias de Google se encuentra conceder prioridad sobre el acceso a sus sistemas operativos a sus socios (Motorola y Verizon) frente al resto de colaboradores.

Desde el primer momento Google dejó claro que su intención al adquirir Motorola era hacerse con una cartera blindada de patentes con las que poder combatir (y permitir que sus colaboradores combatan) mano a mano contra Apple u otros fabricantes en esta guerra interminable de la que ya hemos hablado en alguna otra ocasión. Aunque mucha gente ha recelado, porque la compra de la división móvil de Motorola, ha convertido a Google en un fabricante propio, y bastante fuerte, además de ser la empresa que gestiona completamente el software, y restringe en un primer momento (o en un segundo, tercero o cuarto, como Honeycomb…) el acceso al mismo para quien ellos consideren oportuno.

Con el último susurro, el enésimo desde que se oficializó la adquisición de la compañía americana por parte de la compañía americana, la gente está si cabe más preocupada por el asunto, aunque personalmente no termino de estar de acuerdo con esa postura tan alarmista.

Mucha gente opina que por ejemplo, la gama Nexus va a irse a vivir a Motorolandia para siempre, pero en mi opinión, es algo poco menos que imposible, cuando la compañía que fue capaz de diseñar el Dext ha conseguido, a pesar de ello, hacer maravillas como todas las que pueblan la familia Droid. Es más, de momento van dos Nexus, y camino de un tercero, y nadie se ha fijado en Motorola para hacerlos, sino que ha ido recayendo en colaboradores que estén fuertes en el mercado como HTC, Samsung y gracias a filtraciones sabemos que el primero pudo haber sido cosa de Sony Ericsson. Personalmente veo bastante más viable que Google vaya a aprovechar la gama Droid para hacer sus propios teléfonos, convirtiéndolos así en un referente dentro de la tecnología móvil actual para hacer frente al iPhone y a los cada vez más cercanos Nokia con Windows Phone 7.

De esta manera podrían mantener una familia Nexus funcionando, que serviría para abrir boca de los nuevos sistemas operativos de cara al resto del mundo (fuera de la propia Google) y como programa de partners, para ayudar a reforzar los nexos de unión entre los colaboradores y Google, así como mantener ellos mismos una familia Droid que podría servir para probar y pulir al máximo los nuevos sistemas operativos antes de abrirlos al resto. De hecho, la noticia que os hemos enlazado anteriormente encajaría con una filosofía como esta sin ningún tipo de problema.

¿Vivo en el País Feliz en una casa de gominola? Quizá, pero el problema es que el mundo de la telefonía móvil avanza muy rápido, y tendemos a olvidar las noticias de ayer como si ya no fueran importantes, y muchas de ellas lo son. No debemos olvidar de que hace tan solo unos meses que Google anunció un compromiso con diversos fabricantes alrededor del mundo para ayudar a evitar la fragmentación de Android y conseguir que el robotito verde se convierta en un coloso capaz de marcar la pauta al resto de competidores: la conocida como Liga Android. Es obvio que la decisión de comprar Motorola no ha surgido de la noche a la mañana, y que si su intención fuera abandonar al resto de colaboradores, Google no se habría puesto al frente de una alianza de estas características.

Bueno, pues ahí os dejo mi pequeña reflexión sobre la situación actual de Android y lo que nos podría deparar un futuro no muy lejano, no sin acordarme de dar las gracias al amigo Enrique Hernandez por su apunte en Twitter, que me ayudó a dar forma y pulir un poco este artículo.

Como siempre, ponemos los comentarios a vuestra disposición para reflexionar acerca del tema, y que nos deis vuestra siempre valiosas opiniones al respecto.

Nota del Autor:

Por último, pero no menos importante, comentar que unos problemas personales me han mantenido alejado de los teclados por más de dos meses, pero que finalmente estoy en condiciones de volver, y quiero aprovechar el momento y mi primer articulo tras mi vuelta, para dar las gracias a todos los lectores, redactores, editores y todos los que pertenecéis a la gran familia que es El Androide Libre por vuestra paciencia, apoyo y comprensión en momentos nada fáciles, y por vuestros ánimos para volver.