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El sindicato de tenistas fundado por Novak Djokovic y Vasek Pospisil en 2019 ha lanzado un órdago a las entidades que organizan los torneos de tenis al exponer "el sistema corrupto, ilegal y abusivo" de este deporte. El comunicado de la Asociación de Jugadores de Tenis Profesionales (PTPA), representante de los jugadores que forman parte del Top-500 de los dos circuitos, ha causado un completo terremoto.

La PTPA ha anunciado que las querellas que han sido presentadas en Estados Unidos, Reino Unido y en la Unión Europea "revelan cómo los organismos rectores corruptos del tenis abusan, silencian y explotan sistemáticamente a los jugadores para obtener ganancias personales a través del control monopolístico". 

Con el convencimiento del mal desarrollo del sistema deportivo, el sindicato asegura contar con el respaldo abrumador de los más de 250 mejores jugadores masculinos y femeninos, incluida la mayoría de los 20 mejores jugadores". El bienestar de los tenistas está en tela de juicio y la diferencia con respecto a otros deportes es muy significativa.

"Los jugadores buscan un sistema justo y transparente que priorice sus derechos, salud y seguridad por encima de la autoridad sin control de los órganos rectores del deporte, garantizando que reciban las mismas protecciones y oportunidades que los atletas profesionales de otros deportes globales", se añade en el comunicado.

El CEO de la Asociación de Jugadores de Tenis Profesionales, Ahmad Nassar, afirmó que "el tenis está destrozado", puesto que los tenistas "están atrapados en un sistema injusto que explota su talento, reduce sus ingresos y pone en peligro su salud y seguridad".

El desprecio de las organizaciones

Según el director ejecutivo de la PTPA, antes de llegar a la vía judicial intentaron llegar a un acuerdo con los distintos órganos gobernadores del tenis a los que acusan de estas prácticas (ATP, WTA, ITF e ITIA), sin embargo el diálogo no ha funcionado. "Solucionar estas fallas sistémicas no se trata de perturbar el tenis, sino de salvarlo para las futuras generaciones de jugadores y aficionados", continuó exponiendo.

Cabe destacar que en el comunicado no se expone el nombre de ninguno de los tenistas que han mostrado su conformidad con esta denuncia. El sindicato sostiene que "las demandas exponen abusos sistemáticos, prácticas anticompetitivas y un flagrante desprecio por el bienestar de los jugadores que han persistido durante décadas".

Además, añaden que la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP); la Asociación de Tenis Femenino (WTA); la Federación Internacional de Tenis (ITF) y la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) "operan como un cártel al implementar una serie de restricciones anticompetitivas draconianas e interconectadas y prácticas abusivas".