La madrugada del viernes en Melbourne dejó una de las sorpresas más impactantes del Open de Australia 2025. Daniil Medvedev, el quinto cabeza de serie y finalista en tres ediciones anteriores, fue eliminado en la segunda ronda por el joven estadounidense Learner Tien.
El encuentro, que se prolongó durante 4 horas y 53 minutos, finalizó con un marcador de 6-3, 7-6(4), 6-7(8), 1-6 y 7-6(7), reflejando una batalla épica que terminó cerca de las tres de la mañana.
Medvedev, de 28 años, partía como uno de los favoritos para llegar lejos en el torneo, pero la falta de preparación y su mal estado físico se hicieron evidentes desde el inicio del campeonato.
Tras un debut complicado frente al tailandés Samrej, donde necesitó cinco sets para avanzar, esta vez no logró superar al californiano de 19 años, quien ocupa el puesto 121 del ranking ATP.
La derrota tiene consecuencias significativas para el tenista ruso. Medvedev perderá 1.250 puntos en el ranking debido a su condición de finalista en la edición pasada, poniendo en riesgo su permanencia en el top 10 del tenis mundial.
Además, la falta de entrenamientos previos al torneo, atribuida en parte a su reciente paternidad, fue un factor determinante en su rendimiento irregular.
Un inesperado Tien
Por su parte, Learner Tien vivió la mejor noche de su joven carrera. A pesar de su inexperiencia en escenarios de esta magnitud, el estadounidense mostró una resistencia física y mental admirable, características que le permitieron superar a un rival de mayor jerarquía.
Tien llegó al torneo tras pasar por la fase clasificatoria, acumulando ya cinco victorias en Melbourne, y ahora enfrentará al polémico francés Corentin Moutet en la tercera ronda.
Learner Tien celebra su victoria ante Daniil Medvedev en el Open de Australia
En el duelo contra Medvedev, Tien demostró un temple inusual para su edad. Aunque cedió el cuarto set de manera contundente (1-6), supo recomponerse en el quinto, imponiéndose finalmente en un superdesempate donde ambos jugadores dejaron todo en la pista.
La clave estuvo en su capacidad para devolver casi cualquier bola y en mantener la calma en los momentos más tensos, algo que terminó desquiciando al ruso.
Un partido de altibajos
El encuentro estuvo cargado de emociones, con Medvedev protagonizando tanto momentos brillantes como errores que lo alejaron de la victoria. En el primer set, entregó su servicio en dos ocasiones y apenas opuso resistencia.
El segundo parcial fue aún más caótico, con ambos jugadores intercambiando quiebres de saque hasta llegar a un desempate que favoreció a Tien.
El tercer set parecía destinado a sellar el destino de Medvedev, pero logró salvar un punto de partido con un saque directo y terminó llevándose el parcial en otro reñido 'tie-break'.
En el cuarto set, el ruso mostró su mejor versión, cometiendo pocos errores no forzados y arrollando a su oponente. Sin embargo, su rendimiento volvió a decaer en el último set, donde incluso la lluvia y el cierre del techo del estadio añadieron dramatismo al desenlace.
Además de sus problemas en el juego, Medvedev volvió a ser noticia por su comportamiento. Durante los primeros sets, el ruso mostró actitudes desconsideradas hacia el árbitro, el público y su propio rival, lo que le costó varios avisos.
Estas distracciones parecieron pasarle factura, ya que no logró mantener la concentración en los momentos decisivos.