El piloto suizo de Moto3 Noah Dettwiler ha experimentado una mejoría significativa que supone un alivio para el mundo del motociclismo tras el devastador accidente sufrido el pasado domingo en el Gran Premio de Malasia.
Su equipo CIP Green Power confirmó este miércoles que "el estado de Noah ahora es estable y ya no es crítico", aunque continuará bajo estricta vigilancia en la unidad de cuidados intensivos del hospital de Kuala Lumpur donde permanece ingresado desde el accidente.
Esta actualización marca un cambio fundamental respecto al parte médico anterior del lunes, cuando su condición se describía como "estable pero todavía crítica", una situación clínica que evidenciaba la gravedad extrema de sus lesiones.
El joven de 20 años natural de Basilea había protagonizado uno de los accidentes más impactantes de la temporada durante la vuelta de formación hacia la parrilla de salida.
El siniestro ocurrió momentos antes del inicio de la carrera cuando Dettwiler circulaba lentamente a la salida de la curva 3, aparentemente afectado por un problema mecánico que lo dejó prácticamente detenido en plena trazada.
En ese instante, el recién coronado campeón del mundo José Antonio Rueda se aproximaba a alta velocidad sin detectar a tiempo la presencia del suizo, impactándolo violentamente por detrás.
Sufrió varias paradas cardiacas
Las consecuencias del choque fueron dramáticas. Según reveló Andy Dettwiler, padre del piloto, al medio suizo Blick, su hijo sufrió múltiples paradas cardíacas directamente sobre el asfalto y tuvo que ser intubado y reanimado in situ mientras perdía una gran cantidad de sangre.
El equipo médico trabajó durante casi una hora y 45 minutos antes de poder trasladarlo en helicóptero al hospital.
El parte médico inicial reflejaba la gravedad de la situación: traumatismos craneoencefálicos, torácicos y abdominales severos, fracturas abiertas de tibia y peroné, lesiones pulmonares graves y la necesidad de extirpar completamente el bazo debido a una laceración de grado 4.
Dettwiler fue sometido a múltiples intervenciones quirúrgicas de urgencia durante las primeras 24 horas, todas ejecutadas satisfactoriamente según informó su equipo.
La familia del piloto viajó desde Zúrich hasta Malasia para acompañarlo durante estos momentos críticos, junto a Tom Luthi, expiloto de MotoGP y actual mánager de Noah.
El accidente también generó una profunda polémica sobre la decisión de mantener la carrera de Moto3 tras el incidente. El bicampeón Pecco Bagnaia fue especialmente crítico:
"Pienso que hacer correr a los pilotos 10 vueltas después de ver lo que ha pasado no ha sido algo correcto. No era fácil pensar que se podría salir así después de una caída tan fea". Diversos pilotos cuestionaron a través de redes sociales la gestión del protocolo de seguridad por parte de la organización.
José Antonio Rueda, el otro implicado en el siniestro, resultó con lesiones considerablemente menos graves: fractura en la mano derecha, conmoción cerebral severa y contusiones diversas, permaneciendo consciente en todo momento.
El sevillano de 19 años fue dado de alta para viajar a Barcelona donde será operado de la fractura.
La evolución positiva de Dettwiler representa un rayo de esperanza tras días de máxima preocupación. Aunque el camino hacia la recuperación total será largo y complejo, la noticia de que ha superado el estado crítico supone el primer gran paso en su proceso de sanación.
