París (Enviado Especial)

La vida sonreía a Thomas Bjorn, que tras un tropiezo inicial en la elección de las parejas, parece haber dado con la tecla correcta, y sus jugadores han respondido. Otro festival de buen juego se ha visto esta mañana en Le Golf National de París.

Los europeos mantenían el momentum y no dejaban ni respirar a los americanos. Desde el primer momento se teñían de azul los primeros partidos, y sólo asomaba el rojo tímidamente en el último partido.

Furyk repetía los mismos equipos que la jornada de fourballs previa y Bjorn combinaba a los mejores jugadores de ambos turnos, junto con la pareja revelación de Molinari y Fleetwood, para seguir apretando la soga sobre el cuello del equipo americano, que ve como avanza el torneo y sus miembros no encuentran tan a menudo el fondo del hoyo como su rival.

Sergio Garcia celebra su victoria en el hoyo 17 de la Ryder Cup EFE Agencia EFE

Primer partido

Recurría Bjorn a dos de sus veteranos estrella como Sergio García y Rory Mcilroy para empezar con buen pie la andadura en los fourball de la mañana y acertó de lleno. Brooks Koepka y Tony Finau, tras una increíble remontada ayer, veían como rápidamente los europeos les enseñaban la matrícula y se alejaban a velocidad de crucero.

Una auténtica orgía de buen juego y camaradería la desplegada por el bando local. Empezaba más acertado Rory, pero cuando los americanos apretaron los dientes y redujeron la ventaja de 4 abajo a 1 abajo escaso, fue cuando apareció el español, demostrando una vez más que es, probablemente, el mejor jugador de la historia del torneo, y para él la Ryder, es algo especial.

Con un fantástico putt de más de 6 metros para birdie en el 17, cerraba el partido y daba el primer punto del sábado a Europa. Sergio está muy cómodo en París, y sólo le separa medio punto de ser el máximo artillero de la Ryder Cup.

Paul Casey, del equipo europeo, inicia su primer hoyo durante la segunda jornada de la Ryder Cup 2018 EFE Agencia EFE

Segundo partido

Repetía le capitán europeo con Tyrell Hatton y Paul Casey a pesar de su derrota ayer, y se enfrentaban esta mañana a Dustin Johnson y Rickie Fowler. Pese a perder ayer, los europeos no cambiaron en absoluto su actuación, mejorándola incluso con -9, pero si cambiaba el guión.

Tomaba la iniciativa Paul Casey, desatado con cinco birdies en los primeros seis hoyos. Aguantaba como podía Rickie Fowler, pero poco a poco aumentaban los locales su ventaja. Llegaba el relevo de los otros dos miembros de cada equipo, con tres birdies cada uno que permitía un baile de hoyos que nunca llegaba a inquietar a los europeos.

Un birdie en el hoyo 14 de Casey, el noveno de la pareja, aumentaba a 3 la ventaja a falta de cuatro hoyos, y el novato Hatton se encargó de defender el fuerte hasta que los americanos se quedaron sin hoyos. Victoria por 3&2 casi simultánea a la del primer y tercer partido, el Team USA está desaparecido en combate en París.

Tiger Woods durante el séptimo hoyo en la segunda jornada de la Ryder Cup EFE Agencia EFE

Tercer partido

El tercer enfrentamiento lo protagonizaban la pareja de moda, los nuevos Seve y Olazábal, Molinari y Fleetwood, o "Moliwood" como se les empieza a conocer por París, y Tiger Woods y Patrick Reed. Los americanos no sólo tenían ante sí la revancha, si no también una oportunidad de remisión ante su capitán y compañeros, tras el pobre juego demostrado ayer.

Sin embargo no aprovecharon la oportunidad, al menos Reed, quien sólo anotaba un birdie en toda la ronda, y dejaba prácticamente sólo a Tiger ante la revolución europea. Tommy y Francesco no sólo están demostrando ser la pareja más en forma de toda la Ryder, única invicta, si no que están en absoluta comunión con el público, con continuos gestos de complicidad y pendientes tanto del juego como de mantener el ambiente caldeado. La gran sensación de la Ryder.

Por delante desde el segundo hoyo, el partido termino de decantarse tras el arrebato del italiano entre los hoyos 11 y 13, con tres birdies consecutivos. Bastó con guardar la ropa y esperar los errores americanos para sellar la victoria por 4&3. El octavo punto consecutivo para Europa, de 0-3 a 8-3. Récord de la competición.

Jordan Spieth, del equipo estadounidense, durante la segunda jornada de la Ryder Cup 2018 EFE Agencia EFE

Cuarto partido

Cerraban el turno de mañana "Mr Ryder" Ian Poulter y Jon Rahm contra Jordan Spieth y Justin Thomas. El partido más igualado de la mañana. Fueron numerosos los aciertos por parte de ambos equipos. Esta vez fue Thomas el que llevó el peso del equipo americano, con siete birdies, bien apoyado por Spieth con otros tres, para un parcial total de -9, mismo que ayer, una máquina de restar golpes al campo.

Plantaban cara los europeos, especialmente Poulter durante los primeros 12 hoyos, hasta que despertó por fin la fiera dormida del español, que con dos birdies seguidos reducía la distancia a un hoyo con cuatro por jugar.

Pero Thomas no iba a permitirlo y anotaba un birdie en 16 y 17 para entregar el primer punto en casi 24 horas para los americanos. Salvaban la honra para el Team USA y evitaban así algo que nunca se ha dado en la historia, dos barridos por 4-0 en dos turnos de la misma edición de la Ryder.

Patrick Reed, del equipo estadounidense en la Ryder Cup EFE Agencia EFE

No levanta el pie del acelerador Europa, que parece haber encontrado la senda del éxito y no quiere separarse de ella ni pararse a descansar ni por un momento. Son ocho las victorias consecutivas logradas por los pupilos de Thomas Bjorn, récord desde que se incorporaba el viejo continente a la competición.

Jim Furyk no encuentra la manera de frenar la hemorragia y repetir los mismos partidos que en la jornada de ayer no le ha traído, ni mucho menos, el mismo resultado. 8-4 para Europa que sigue disparada hacia la conquista de la cuadragésimo segunda edición de la Ryder Cup, salvo que los americanos consigan meterle mano a un inspiradísimo combinado europeo.