Impactantes noticias las que llegan desde la concentración de la selección de Marruecos. El equipo está siendo víctima de la situación extrema que se vive en Guinea, donde estaban alojados para disputar un partido internacional. El intento de golpe de estado que se ha desatado este domingo en el país ha provocado que el equipo marroquí haya tenido que ser aislado.
En estos momentos, la selección de Marruecos se encuentra a la espera de acontecimientos en un hotel de la capital de Guinea, Conakry, poniendo todos los medios posibles para que no ocurra ninguna desgracia con jugadores y miembros del staff técnicos. Las últimas horas están siendo de mucha tensión y de cierto pánico.
De momento, el combinado nacional marroquí, que cuenta con los sevillistas En-Nesyiri, Bono y Munir, y con el jugador del PSG Achraf Hackimi entre otras grandes estrellas, ha sido aislado para evitar males mayores debido a que la situación en el país está siendo bastante complicada de abordar.
Todo se ha debido a una nueva sublevación de fuerzas de militares en Guinea que amenazaba con el estallido de un nuevo golpe de estado, lo que podría llevar el caos definitivo al país. Esta situación ha vivido su punto más álgido durante la previa del encuentro que debían disputar las selecciones de Guinea y Marruecos y que está dejando horas de miedo y preocupación en todo el entorno de ambos equipos.
Desde primeras horas de la mañana de este domingo se han podido oír disparos de armas automáticas y explosiones por todas las zonas importantes de la capital guineana y las calles están siendo abarratodas por decenas de soldados.
Aunque todavía no se ha comunicado nada de manera oficial, todo hace indicar que el choque que debía disputarse este lunes será definitivamente suspendido. Mientras tanto, la selección de Marruecos se mantiene a la espera y en perfectas condiciones, pero aislados en un hotel para intentar poner la mayor de las precauciones posibles.
Ha estallado el caos
La situación ha empeorado en las últimas horas a pesar del enorme clima de tensión que hay en Guinea. El equipo marroquí pudo completar sin mayores problemas y con total normalidad su sesión de entrenamiento de este sábado, pero lo cierto es que en la mañan del domingo se ha producido un nuevo repunte de la violencia y la crispación se ha intensificado hasta oficializar ese intento de golpe de estado que se ha producido en las últimas horas.
El gobierno central de Marruecos ya está trabajando a destajo para intentar garantizar el regreso de la expedición del equipo nacional cuanto antes, pero las gestiones no están siendo nada sencillas debido al caos que reina en la zona. En estos momentos, el control institucional brilla por su ausencia, ya que las fuerzas de élite de Guinea han asegurado haber capturado al presidente Alpha Condé con la intención de disolver las instituciones, mientras el ministerio de Defensa ha asegurado que había logrado repeler su ataque contra la presidencia.
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