Segundo batacazo consecutivo al intento de disputar un partido de una de las grandes ligas fuera de sus fronteras. Si hace unas semanas el polémico Villarreal-Barça se quedó sin ir a Miami dejando en entredicho la imagen de LaLiga, ahora el intento frustrado se traslada a Italia.
La Serie A había apostado por llevar el encuentro entre el AC Milan y el Como correspondiente a la jornada 24 del campeonato al extranjero. De hecho, ya se había designado la ciudad australiana de Perth como sede para dicho enfrentamiento, pero todo se ha caído a última hora.
El choque estaba programado para el próximo 8 de febrero, pero a poco más de un mes vista para la fecha designada, la aventura australiana se ha caído por completo.
La Serie A anunció este mismo lunes que "los planes para albergar en Perth el primer partido de un Campeonato Europeo jugado fuera de las fronteras nacionales han sido cancelados de común acuerdo".
El motivo de esta cancelación no es otro que los riesgos financieros que suponen las condiciones adicionales impuestas por la Confederación Asiática de Fútbol (AFC). Estos parámetros, tal y como indicó la Serie A, "no pudieron ser cumplidos sin riesgos financieros para el gobierno de Australia Occidental y la Serie A", lo que desencadenó en la cancelación del partido.
Diferente al partido de Miami
Este iba a ser el primer partido de la historia de la Serie A que se iba a disputar fuera de las fronteras italianas. Sin embargo, tal y como pasó semanas atrás con el Villarreal-Barcelona de La Liga, la aventura no fructificará.
Había, no obstante, algunas diferencias con respecto al famoso partido de Miami. En el caso del Milan-Como, los 20 clubes que componen la Serie A esta temporada estaban de acuerdo en traspasar fronteras, algo que no sucedía en España.
Hace cuatro días, el presidente de la Serie A, Ezio Simonelli, había anunciado que el partido se jugaría en Perth tras una reunión con el presidente de FIFA, Gianni Infantino.
Todo ello, pese a que hubo un punto de conflicto con la designación de los árbitros. La Federación Asiática exigió que los colegiados que dirigieran este encuentro fueran suyos, y la Serie A finalmente terminó sucumbiendo a esta exigencia que a punto estuvo de llevarse por delante el acuerdo en un primer momento.
"Esta conclusión es una oportunidad perdida para el crecimiento del fútbol italiano a nivel internacional, que priva a los aficionados de la Serie A en el extranjero de vivir el sueño de asistir en vivo a un partido de su equipo favorito", afirmó Simonelli sobre la cancelación del partido en Australia.
Para Rita Saffioti, la ministra de Deportes de Australia Occidental, este desenlace fue "una decisión correcta"
"Nuestro Gobierno ha trabajado de cerca con el AC Milan y la Serie A, y estábamos seguros de que este primer evento mundial tendría lugar en Perth. Es decepcionante, pero es la decisión correcta: no estábamos dispuestos a exponer a Australia Occidental a un nivel de riesgo inaceptable", concluyó.
