El 'caso Laporte' ha llegado a su fin después de que la FIFA haya dado marcha atrás y permita la inscripción del ya exjugador de Al-Nassr por el Athletic Club. El central hispano-francés lleva unos días en Bilbao esperando a que se resolviera su expediente y finalmente este ha sido favorable.
A pesar de que LaLiga llegó a dar por buena la documentación que envió el club vasco, el organismo rector del fútbol europeo no permitió su inscripción al considerar que los papeles no llegaron a tiempo, es decir, antes de las doce de la noche del 31 de agosto.
La razón para dar marcha atrás no sería otra que constatar que la burocracia sí entró a tiempo en la sede de LaLiga, a las 23:59 precisamente. El problema se originó en el volumen de documentación enviada, que provocó un colapso y demoró la revisión del expediente.
Desde el Palacio de Ibaigane no tardaron en confirmar las noticias. A primera hora de la tarde, el Athletic Club lanzó un mensaje a través de su canal oficial manifestando que tenían el visto bueno de la FIFA.
"El Athletic Club desea informar que la FIFA ha autorizado a la Real Federación Española de Fútbol para obtener de la Federación de Fútbol de Arabia Saudí el Certificado de Transferencia Internacional (CTI). Una vez que dicho CTI sea emitido se podrá realizar la inscripción del jugador Aymeric Laporte en el Athletic Club".
AFE y RFEF han intercedido entre el jugador y la FIFA para evitar que se quedara en una situación de vulnerabilidad. La información enviada por el Athletic a LaLiga y RFEF entró a tiempo. El entorno del central ya era optimista con la resolución que pueda tomar la FIFA en las últimas horas.
La sintonía entre el jugador, su club y el propio Athletic para que se sellara la operación y Laporte vistiera de rojiblanco desde ya ha tenido su peso. El central, que sigue en Bilbao entrenándose por su cuenta, solo quería jugar con el Athletic pese a las múltiples ofertas recibidas desde Leverkusen, Mónaco, Turquía o Nápoles.
La solución a un problema central
La no inscripción de Aymeric Laporte había generado un problema en el eje de la defensa del Athletic Club. Ernesto Valverde sólo contaba con dos centrales puros para la posición -Vivian y Paredes-, en una temporada que se espera exigente con el regreso del equipo a la Champions League.
La sanción de la UEFA a Yeray Álvarez por dopaje fue un obstáculo inesperado y el caso Laporte había dejado la retaguardia de los leones desguarnecida. Ahora el Txingurri podrá respirar con un defensa de primer nivel en su plantilla.
