Mason Greenwood ha recuperado la sonrisa en Francia y se ha consagrado como uno de los mejores jugadores de perfil ofensivo gracias a la confianza que ha depositado en él por Roberto De Zerbi... y que en su momento también hizo José Bordalás cuando el inglés estuvo en el Getafe.
El Olympique de Marsella ha encontrado en el jugador inglés la pieza por la que gira un ambicioso proyecto que pasa por disputarle la Ligue 1 al PSG. A pesar de la polémica que generó en el país galo su fichaje debido a su oscuro historial sobre su vida personal, Greenwood se ha ganado el cariño de los aficionados con humildad, entrega y sobre todo goles.
En su primera temporada en Francia marcó 22 goles y repartió 5 asistencias, unos números que han permitido al club clasificarse a la Champions tres años después. Este año afronta la que puede ser una de las campañas más importantes de su carrera y Mason ha empezado fuerte.
A pesar de la derrota a domicilio ante el Rennes (1-0) en el primer partido de la Ligue 1, Greenwood lideró al Olympique de Marsella en la victoria ante el París FC por 5-2. El inglés inauguró el marcador desde los once metros y dio dos asistencias.
Y es que De Zerbi le ha pedido esta temporada mantener el olfato goleador que demostró tener la pasada campaña y además tener una repercusión aún mayor en relación a los pases de gol. A sus 23 años, Mason Greenwood ha aceptado el reto y ya nada queda de su año más oscuro.
La denuncia de su pareja
En enero de 2022, unos días después de jugar contra el West Ham, la última promesa de la cantera del Manchester United fue detenido por la policía del condado de Gran Mánchester acusado de intento de violación, agresión con resultado de daño corporal real y comportamiento controlador y coercitivo.
Aunque Reino Unido mantiene por ley el anonimato hasta de por vida de la denuncia interpuesta a nivel legal, Harriet Robson, su pareja y madre de su hijo recién nacido, hizo públicas las supuestas pruebas que llevaron a actuar a las autoridades.
La imágenes de la pregunta agresión de Greenwood a su novia.
"Para que sepan lo que realmente me ha hecho Mason Greenwood", escribió en sus stories en Instagram mientras compartía imágenes donde aparecían diversas imágenes de lesiones físicas además de compartir un audio en el que, presuntamente, ella rechazaba una propuesta para mantener relaciones sexuales y en el que un hombre trataba de imponer su voluntad de tenerlas.
Tras su detención, comenzó la vorágine. El Manchester United le suspendía y se comprometió a devolver el dinero a todos los que tuvieran su camiseta, Nike rompía su contrato de patrocinio y los medios de todo el mundo se hacían eco de las acusaciones y la detención.
Al fin y al cabo, Greenwood era la joya del fútbol británico, un titular habitual de uno de los clubes más seguidos a nivel mundial y que ganaba peso con cada convocatoria que pasaba con Inglaterra.
Su fichaje por el Getafe
El fichaje de Greenwood por el club azulón en agosto de 2023 se convirtió en una de las operaciones más sorprendentes y complejas del mercado de fichajes. La operación se cerró literalmente sobre la bocina del último día de mercado, después de intensas negociaciones.
Ángel Torres se convirtió en uno de los grandes valedores del inglés, apostando por un jugador que llevaba dieciséis meses de inactividad tras verse envuelto en acusaciones de violencia de género que posteriormente fueron retiradas.
Mason Greenwood conduce el balón en un partido ante el Atlético de Madrid.
La operación demostró ser un éxito rotundo desde el punto de vista deportivo y económico. Greenwood dejó huella en el Coliseum y a pesar de que el Getafe quería mantenerlo, el Manchester decidió venderlo al Olympique de Marsella por 26 millones de euros fijos más 5 en variables.
No salió mal parado un club azulón que recibió aproximadamente 6 millones de euros gracias a su 25% de participación en los derechos del jugador.
Además, el acuerdo incluía una cláusula aún más favorable: el Getafe recibirá el 20% de cualquier ingreso futuro que el Manchester United obtenga de Greenwood, lo que significa que seguirá beneficiándose económicamente de futuras transferencias del jugador.
Y tal y como está rindiendo Greenwood, no sería de extrañar que el inglés juegue algún día en uno de los grandes clubes de Europa.
