La conmoción que embarga a Portugal desde la madrugada del jueves por la trágica muerte de Diogo Jota y su hermano André Silva se trasladó este viernes a Gondomar, donde los cuerpos de ambos futbolistas fueron recibidos con aplausos, lágrimas y un silencio sobrecogedor.
Las puertas de la Capela da Ressurreição se abrieron a primera hora para acoger el velatorio, al que han acudido familiares, amigos, compañeros de profesión y cientos de aficionados.
Los féretros llegaron pasadas las 23:00 horas del jueves, procedentes de la localidad española de Puebla de Sanabria, donde habían sido trasladados tras el accidente de tráfico que acabó con sus vidas en la A-52, a unos diez kilómetros de la frontera con Portugal.
Los dos hermanos fallecieron en el acto después de que el Lamborghini Huracán en el que viajaban se saliera de la carretera, volcara y se incendiara.
Las llamas, que alcanzaron incluso la vegetación cercana, no dieron oportunidad a los servicios de emergencia de salvarles.
El sacerdote José Manuel Macedo, párroco de Gondomar, explicó que la ceremonia fúnebre se celebrará el sábado a las 10:00 de la mañana en la Igreja Matriz, anexa a la capilla donde se realiza el velatorio.
"Estamos disponibles para celebrar su vida con todos, compartir el dolor y la esperanza cristiana", declaró Macedo a CNN Portugal.
Según la investigación preliminar, una rueda del Lamborghini habría reventado durante una maniobra de adelantamiento, lo que provocó la pérdida de control del vehículo. No se ha confirmado quién de los dos conducía en ese momento.
Ambos se dirigían a Santander para embarcar en un ferry rumbo al Reino Unido. Diogo, que acababa de ser operado de los pulmones, había sido desaconsejado por los médicos a volar, por lo que optó por viajar por carretera con su hermano André, de 26 años.
Tenían previsto embarcar a las 16:00 y llegar a Plymouth el viernes por la mañana, de cara al inicio de la pretemporada del Liverpool el lunes.
Apenas habían pasado doce días desde que Diogo Jota se casara con Rute Cardoso, madre de sus tres hijos y su pareja desde los 16 años, en una ceremonia íntima y emotiva celebrada en Oporto.
En su última publicación en redes sociales, el delantero compartió un vídeo de la boda acompañado de un mensaje: "Soy el hombre más afortunado del mundo por ser tu esposo". La respuesta de Rute fue igualmente conmovedora: "Mi sueño hecho realidad".
La muerte de los hermanos ha generado una ola de dolor en el mundo del fútbol. El club inglés Liverpool, donde Jota militaba desde 2020, expresó su devastación por la noticia, afirmando que se trata de "una pérdida inimaginable" para la familia, el equipo y los aficionados.
A las puertas de Anfield, se han depositado flores, camisetas y mensajes en su memoria. "Lo amábamos como persona y como jugador", escribió el entrenador Arne Slot, conmovido.
Homenaje de Diogo Jota en los aledaños de Anfield
La Federación Portuguesa de Fútbol también emitió un comunicado cargado de emoción: "Diogo Jota no era solo un jugador extraordinario, con casi 50 internacionalizaciones con la selección A, sino también una persona admirada por todos. Su alegría era contagiosa".
Su presidente, Pedro Proença, pidió a la UEFA un minuto de silencio antes del partido entre Portugal y España del Europeo femenino, como homenaje a los hermanos desaparecidos.
Cristiano Ronaldo, compañero y amigo del delantero, escribió: "No tiene sentido. Estábamos juntos hace nada con la selección y ahora esto. A su familia, a su esposa y a sus hijos, les envío toda mi fuerza. Sé que siempre estarán con ellos. Descansad en paz, Diogo y André. Os echaremos de menos".
El legado de Jota en el fútbol es incuestionable. Con el Liverpool conquistó tres títulos, incluido el campeonato de la Premier League en la temporada 2024/25, en la que marcó seis goles en 26 partidos.
Además, fue clave en la reciente conquista de la Nations League con Portugal, donde fue titular en la final ante España.