Marc Cucurella está siendo objeto de constantes pitos y abucheos cada vez que toca el balón en el duelo entre España y Francia correspondiente a las semifinales de la UEFA Nations League.
El encuentro, disputado en Stuttgart, ha sido testigo del rechazo de parte del público alemán hacia el lateral izquierdo del Chelsea, en una actitud que ha causado malestar e incluso condenas desde medios germanos.
La raíz de esta reacción se remonta al España - Alemania de los cuartos de final de la Eurocopa 2024. En ese encuentro, durante la prórroga y con empate en el marcador, un disparo de Jamal Musiala golpeó en la mano de Cucurella dentro del área.
Aunque los jugadores alemanes reclamaron penalti, el árbitro Anthony Taylor, tras consultar el VAR, decidió no sancionar la acción al entender que la mano fue involuntaria, amparado en las directrices arbitrales establecidas por la UEFA para ese torneo.
Esta decisión fue duramente criticada en Alemania. Muchos aficionados consideraron que el penalti debió señalarse y que la jugada cambió el rumbo del partido.
Cucurella, con la Eurocopa en las manos.
Como consecuencia, aquellos hinchas alemanes que ya tenían entradas para semifinales y final -confiando en que su selección llegaría lejos- asisten a los partidos descargando su frustración sobre Cucurella, a quien identifican erróneamente como responsable.
Varios medios alemanes han censurado esta actitud, calificándola de "antideportiva" y pidiendo respeto: "La eliminación de Alemania no es culpa del lateral izquierdo de llamativos rizos, sino de una interpretación completamente equivocada de una regla de la mano".
A pesar de los pitos, Cucurella se mantiene firme en el campo, sin reaccionar ante los abucheos y centrado en el objetivo de alcanzar la final. Ya en la previa al partido aseguró que se esperaba esta reacción de la afición germana.