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Aficionados radicales de PSG y Aston Villa protagonizaron un altercado brutal en un bar de París en vísperas del encuentro de la Champions League. En un video difundido en redes sociales se observa la violencia desatada entre los ultras.

En el caótico escenario, incluso se lanzaron taburetes que impactaron a algunos de los hinchas. El suceso, ocurrido en pleno ambiente pre-partido, tuvo lugar en un establecimiento del centro de la ciudad y fue captado desde el interior del local.

Mientras tanto, la preocupación no se limita únicamente a este altercado. Según medios ingleses, alrededor de 3.000 seguidores del Aston Villa estarán en la capital para presenciar el partido de ida de los cuartos de final. Solo 2.000 de ellos cuentan con entradas; es decir, 1.000 aficionados se verán obligados a disfrutar el partido en locales y bares de la ciudad.

Ante este escenario, las autoridades han redoblado esfuerzos en el despliegue de medidas de seguridad en puntos estratégicos. El dispositivo de seguridad se ha intensificado en áreas clave, incluyendo el reforzamiento de las medidas en las cinco principales estaciones de tren, destacando la presencia de agentes en la Gare du Nord. En paralelo, se han activado protocolos especiales en los aeropuertos de la región para controlar la llegada de los visitantes.

Esta precaución proviene de la clasificación del encuentro, considerado de alto riesgo por la División Nacional de Lucha contra el Vandalismo (DNLH), que ha asignado un 'riesgo de incidentes' moderado, representado por un 3 sobre 5 en su escala de peligrosidad.

El ambiente en París se ha caldeado aún más ante la llegada de los 'villanos'. Las autoridades han advertido sobre la posibilidad de nuevos enfrentamientos, dada la situación tensa que se vivió la noche del martes en las calles. Los trabajadores de seguridad y la policía se han movilizado para evitar que los disturbios se expandan, especialmente en zonas cercanas al estadio y áreas de alto tránsito de personas.

En el ámbito deportivo, a pesar de las presiones y el clima inestable, el partido también despierta expectativas. Los seguidores del PSG confían en que el encuentro les será favorable. En la actualidad, el equipo dirigido por Luis Enrique se encuentra en una racha casi perfecta en lo que va del 2025, con actuaciones destacadas salvo por la derrota en la ida de los octavos de final contra el Liverpool.

Por último, el ambiente en las inmediaciones del Parque de los Príncipes se prepara para otro episodio de tensión, ya que la llegada masiva de aficionados promete aumentar la presión sobre los dispositivos de seguridad. Los organizadores y autoridades locales continúan en alerta máxima, conscientes de que cada detalle puede marcar la diferencia en el desarrollo de la noche.