LaLiga ha decidido abandonar a Ucrania en las retransmisiones televisivas de los partidos. La patronal ha cambiado la bandera por el lema "Ley del Deporte para todos". Javier Tebas deja a un lado la guerra para aumentar su presión sobre el Gobierno e intentar salvar su acuerdo con el fondo de inversión CVC. Real Madrid, FC Barcelona y Athletic se han negado a que aparezca ese mensaje en sus encuentros.

En los últimos días, LaLiga ha decidido amenazar con una huelga en el fútbol antes del Mundial si se aprueba el proyecto en el que están trabajando PSOE y PP. Fuentes de la negociación aseguran que "nunca ha existido una enmienda sobre la Superliga", tal y como se ha excusado Tebas para amenazar con un paro en las próximas jornadas. 

El motivo oculto de esta presión que va en aumento es que LaLiga necesita que la nueva Ley del Deporte ampare legalmente el acuerdo al que llegó Tebas con CVC. En caso de que esto no ocurriera, el fondo de inversión podría romper el trato y reclamar a los clubes los millones de euros que ya han recibido. 

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Fuera de este acuerdo se encuentran Real Madrid, FC Barcelona y Athletic Club. Dichos equipos plantearon una alternativa a los demás clubes que aún sigue vigente: un crédito de 2.000 millones de euros al 2,3% de interés. Una operación mucho más rentable que el 20% o 25% de interés que pagarán las entidades deportivas a CVC en 50 años.

Javier Tebas compareciendo ante los medios. EFE

Esta propuesta de Real Madrid, FC Barcelona y Athletic sigue aún vigente y está respaldada financieramente por JP Morgan, Merrill Lynch y HSBC. La demanda presentada contra LaLiga y Javier Tebas por la operación de CVC inquieta al presidente de la patronal y por ello intenta legalizar el acuerdo a través de la nueva Ley del Deporte. 

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Real Madrid y Barcelona niegan que hayan pedido aumentar sus ingresos por los derechos de TV, tal y como se ha señalado desde LaLiga para aumentar la presión. Los dos clubes más grandes de España han aumentado solo un 9% el dinero recibido por esta partida en los últimos ochos años, mientras que el resto de equipo promedia un 124% de aumento de ingresos por la TV.  

Los intereses de Tebas

En el acuerdo con CVC se incluye una cláusula en la que Javier Tebas debe continuar como presidente durante los próximos años. Desde que llegara a su actual cargo, Tebas ha aumentado considerablemente su sueldo. Ha pasado de los 360.000 euros anuales a los más de 3,6 millones que cobra en este momento. 

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Por tanto, Tebas ha cambiado en las televisiones de los españoles la invasión de Rusia a Ucrania por su guerra particular. La patronal defiende que si el acuerdo con CVC no tiene amparo legal pondría en peligro 10.000 millones de euros. El fondo de inversión, del que Javier de Jaime es su máximo ejecutivo, se guardó la opción de pedir las oportunas indemnizaciones a LaLiga en caso de que el acuerdo fuera declarado ilegal y, además, tiene la posibilidad de romper el trato si la Ley del Deporte no lo 'blanquea'. 

Lo que quiere Tebas es que la Ley del Deporte deje sin vigor al RD 5/2015 que obliga a la venta conjunta de los derechos de televisión de los partidos de LaLiga. En ese Real Decreto es en el que se amparan Real Madrid, FC Barcelona y Athletic en su demanda a LaLiga y crea un grave problema legal a Tebas si la justicia termina dando la razón a estos clubes. 

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De momento, en el Real Madrid - Sevilla no se vio el mensaje de "Ley de Deporte para todos" y sí la bandera de Ucrania. Tanto el club blanco como el FC Barcelona y el Athletic Club se han negado a que en sus encuentros Tebas haga política y presione solo en función de sus intereses personales. 

La huelga de LaLiga antes del Mundial es la última amenaza a la desesperada de Tebas para salvar su acuerdo con CVC a través de la Ley del Deporte. El jefe de la patronal es el que promueve el paro contra su propio negocio, a pesar de que tendría que indemnizar a las televisiones si esto finalmente sucediera.