Segunda decisión de la UEFA contra Rusia por su invasión a Ucrania. La organización del fútbol europeo habría expulsado al Spartak de Moscú de la Europa League, en la que había quedado encuadrado en los octavos de final con el RB Leipzig. La información, adelantada por el diario BILD, explica que la eliminatoria sería cancelada y el conjunto alemán pasaría a cuartos sin jugar. Esta decisión llega después de mover la final de la Champions League de San Petersburgo a París.

Será finalmente el Stade de France, donde habitualmente juega la selección gala, el escenario que albergue la final el próximo 28 de mayo. Tras este anuncio, la UEFA también había dictaminado que los equipos rusos jugarán sus partidos de local en una sede neutral, además de cambiar de sede aquellos partidos de selecciones que se tenían que celebrar dentro de Rusia. El máximo organismo sacaba el fútbol del territorio gobernado por Vladímir Putin mientras el conflicto bélico siguiera en liza.

El ente había condenado la invasión militar rusa en Ucrania: "Como organismo rector del fútbol europeo, la UEFA trabaja incansablemente para desarrollar y promover el fútbol de acuerdo con los valores comunes de Europa, como son la paz y el respeto a los derechos humanos, todos presentes en el espíritu de la Carta Olímpica. Mantenemos nuestra solidaridad con la comunidad futbolística ucraniana y estamos dispuestos a tender la mano al pueblo de Ucrania".

Victor Moses celebra un gol con el Spartak de Moscú. Mike Egerton / PA Wire / dpa

Por su parte, la FIFA anunció este domingo que Rusia podría seguir jugando. El máximo estamento del fútbol mundial solo sancionaba a la selección del estado que lidera Vladímir Putin con una serie de medidas que pasaban por jugar sin su bandera habitual, sin su himno antes de los partidos, en campo neutral y a puerta cerrada. La nación tiene pendiente disputar la repesca del Mundial de Catar 2022 ante Polonia. Estos, así como República Checa y Suecia, que se enfrentan en ese mismo cuadro, se negaban a jugar en suelo ruso.

Mientras Polonia o Suecia se han quejado del hecho de tener que no jugar contra el equipo que ahora dirige Valery Karpin, otras federaciones han ido más lejos y han pedido la expulsión de Rusia de las competiciones. Ha sido el caso de Francia o España, después de que el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, anunciase que el país iba a "plantear también la expulsión de los equipos deportivos rusos de las competiciones".

Rusia y la UEFA

La guerra en Ucrania sacude el mapa deportivo en Europa. El rechazo generalizado a las acciones de la Rusia de Vladímir Putin obliga a ser consecuente con los movimientos a dar. El problema es que dar la espalda al poderío ruso, en algunos casos, supone hacerlo a importantes fuentes de ingresos, que es en la encrucijada en la que se encuentra ahora la UEFA de Aleksander Ceferin. El patrocinio con Gazprom se lleva a debate.

De hecho, el Schalke, equipo alemán que llevaba su patrocinio, ha anunciado la ruptura del contrato que les unía. Gazprom es una empresa gasística fundada en 1989. Hasta 1993 no se privatizó, pero aún así el gobierno ruso mantiene el 38,37% de las acciones de la compañía. Actualmente, es una de las empresas energéticas más grandes del mundo y guarda un fuerte, y casi obvio, vínculo con el presidente Putin. Hace 23 años que entró en el fútbol y su presencia se ha ido expandiendo al ritmo que le ha llevado a ser el principal suministrador de gas de Europa Occidental.

[Más información: La Eurocopa 2024 en Alemania aumenta la presión de Gazprom a la UEFA: un patrocinio clave]

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