La frase "juegas como una chica" siempre ha estado vinculada al fracaso y al desprecio. Un machismo que durante años se ha cultivado entre los más pequeños y que con los avances de la sociedad se ha ido apartando hasta casi su extinción. Gracias al fomento de la igualdad y al impulso del deporte femenino el cliché está más cerca de desaparecer. El claro ejemplo de ello es el Zaragoza CFF y su equipo alevín (10 y 11 años), que está a un paso de hacer historia ganando una liga mixta contra plantillas rivales plagadas de chicos

El título, en caso de consumarse este sábado, ya es de por sí heroico. El Zaragoza CFF es líder de su grupo con 40 puntos, nueve más que el segundo clasificado y con 13 victorias y un empate en lo que va de temporada. Salvo sorpresa, se llevarán tres puntos más para amarrar el campeonato y serán el primer equipo de Aragón en conseguirlo con un equipo únicamente compuesto de chicas. El resto de clubes, según explican a este periódico, tienen como mucho una o dos jugadoras en sus plantillas. En muchos casos ninguna.

Sin embargo, la historia de superación de esta cantera va más allá. Hace casi tres años se quedaron sin instalaciones donde entrenar y hace uno estuvieron al borde de no poder disputar competiciones mixtas por una norma de la Federación de Aragón que la presión social acabó echando para atrás. Si todo sale bien, tal y como confirma el vicepresidente del club a EL ESPAÑOL, podrán recibir un pasillo en el partido del primer equipo ante el Levante Las Planas un día después.

Las jugadoras confían en lograr la machada. "Hemos trabajado en equipo y hemos luchado mucho. Yo creo que vamos a ganar si tenemos confianza y jugamos bien", dicen desde el vestuario. "Vamos primeras, si seguimos así esforzándonos y trabajando en equipo podremos ganar la Liga". El título está en sus propios pies. Y la cita para la historia del fútbol base, también.

Las eternas complicaciones

El hecho de que un equipo puramente femenino gane una competición mixta ya supone un logro. El resultado se produce en un contexto de crecimiento notable. El fútbol femenino sigue ganando espacio y la próxima temporada tendrán, por fin, la primera liga femenina profesional de la historia de España. Pero la cantera del Zaragoza CFF ha tenido que afrontar muchos más problemas durante estos últimos años.

Los conflictos comenzaron en 2019, cuando fueron expulsadas hasta 150 niñas de las instalaciones donde entrenaban. El club tenía un contrato con la Federación de Aragón para emplear dichos terrenos. Sin embargo, los conflictos entre ambas entidades acabaron por afectar a las jugadoras.

La entidad maña emitió un comunicado explicando que su primer equipo ya no jugaría en el Pedro Sancho. Horas después, según explicó el mismo Zaragoza, recibieron un mail donde se confirmaba por parte de la FAF la "suspensión hasta nueva orden" del contrato que les permitía usar las instalaciones. Las jóvenes se quedaron sin campo de un día a otro y el conflicto legal entre las partes se acrecentó.

El pasado 2021 una sentencia de la Audiencia Provincial decretó el "incumplimiento de contrato por parte de Federación Aragonesa de Fútbol respecto al convenio de 30 de agosto celebrado entre las partes" en relación a las instalaciones que usaban las canteranas, poniéndose fin a una pugna que se extendió por medios y juzgados.

Por si fuera poco, el gran golpe pudo llegar el 2020. La Federación de Aragón, con el apoyo suficiente de su seno, modificó el reglamento limitando a un 20% la presencia de chicas en los equipos mixtos. Según indicaron, ya había ligas femeninas y masculinas para que cada grupo pudiera jugar de manera segregada. Sin embargo, clubes como el Zaragoza se opusieron por el hecho de afectar a jugadores de 10 y 11 años que apenas han iniciado su crecimiento físico.

La medida de la FAF provocó la reacción de políticos, clubes, sindicatos y hasta jugadoras como Vero Boquete. "En las categorías masculinas de infantil, alevín, benjamín, prebenjamín y debutante se permitirá que entre los componentes de cada equipo exista un porcentaje de futbolistas femeninas que en ningún caso podrá superar el 20% del máximo de licencias permitidas por equipo", esgrimía la norma.

Dos años después, un equipo íntegramente femenino de categoría alevín ha podido competir en una liga mixta y está a un solo paso de ganarla tras superar numerosos obstáculos.

El fomento del deporte mixto

Rubén Alcaine, vicepresidente del Zaragoza CFF, destaca a EL ESPAÑOL que el desarrollo de los más pequeños es "absolutamente fundamental" que parta de competiciones con chicos y chicas. Una educación que, dado el físico de los jugadores en estas categorías, no afecta.

"Hasta que no haya una diferencia física notoria, que se da a partir de cadete que son 12 o 13 años, entendemos que no tiene que haber segregación por sexo en la práctica deportiva. Si hay otras competiciones masculinas o femeninas por el número de equipos me parece bien que cada uno elija donde apuntarse. Pero nosotros entendemos que se van a formar mucho mejor en una liga mixta que en una específicamente femenina", traslada a este periódico.

Y es que durante mucho tiempo se ha establecido el insulto de "juegas como una chica". Algo que, con triunfos como estos, puede acabar de perder el sentido. "Si la chica te ha ganado, pues te ha ganado. Te gana, vale, sea niño o niña. Hay que normalizar conductas. Se trata de que crezcan en materia deportiva y social, normalizando una práctica deportiva mixta que al final están en mismas condiciones físicas y donde tienen que competir".

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