El Sevilla consiguió sumar tres puntos ante el Atlético de Madrid en un partido muy disputado y que no se resolvió hasta los instantes finales. El equipo andaluz falló un penalti al inicio tras un paradón de Oblak, se adelantó con un gol de Acuña y deja al Atlético si colchón en La Liga y con la pelea por el liderato más igualada que nunca. [Narración y estadísticas: Sevilla 1-0 Atlético de Madrid]

El conjunto rojiblanco, que defendía el liderato tras el parón de selecciones, se quedó muy lejos del nivel habitual en los primeros compases del duelo. Porque el equipo de Lopetegui se hizo completamente con el dominio del juego. El Sevilla, con un Rakitic omnipresente en el centro del campo, decidía el ritmo del encuentro y la dirección del balón. Los de Simeone apenas podían apostar por la defensa en busca de algún ataque rápido que pillera descolocada a la zaga hispalense. Cosa que no sucedió y que puso en serios apuros a los visitantes.

Tanto que no se había llegado ni al minuto 10 y se producía la primera polémica del encuentro. El Sevilla, que acosaba en el área al cuadro colchonero, sacó una acción de penalti muy reclamada en el Atlético. Un golpe a Rakitic provocaba la pena máxima y obligaba a Oblak a intervenir una vez más, como sucedió en la anterior jornada ante el Alavés. Ocampos recogía el balón y, luchando contra los fantasmas del Camp Nou, buscó un remate duro. Pero el atacante, una vez más, perdonó desde el penalti.

Oblak mantenía el empate con un nuevo paradón y buscaba la reacción de su equipo gracias a esta acción. Lo que podía convertirse en un revulviso para los de Simeone, pese a todo, fue la confirmación de que el Sevilla se gustaba. Centros al área, remates constantes y un control absoluto ante un Atlético sin ideas.

El Atlético sufrió durante los 20 minutos iniciales. Pero, a partir de ahí y una vez acoplados al juego, consiguieron rebajar el nivel del rival para igualar la balanza. No era suficiente, pues los ataques por banda y la lesión de Lodi -entraba en su lugar Correa- continuaban poniendo en aprietos a los rojiblancos, que se fueron al descanso con un 0-0 que valía mucho.

Acuña... y a sufrir

Bien por cuestiones tácticas o por simple estado físico, ambos conjuntos vivieron un periodo de calma durante la segunda parte. El Atlético, aparentemente, estaba mejor plantado en el terreno de juego ante un Sevilla con un ritmo menor al de la primera mitad. Sin embargo, todo resultó ser un espejismo. Primero con el gol de Acuña y luego con las sucesivas polémicas que pusieron al Atlético con los nervios a flor de piel.

El tanteo se convirtió en un golpe real en el 70'. Cuando el empate parecía el destino final, Jesús Navas se sacó un jugadón individual que transformó Acuña. Era su primer tanto y llegaba tras un centro del veterano atacante hispalense. La queja rojiblanca se producía porque, en el inicio de la jugada, había una mano del Sevilla. El colegiado, sin embargo, decidió no señalar nada tras los consejos del VAR.

El Atlético, entonces, entró en una espiral de quejas y errores. Ni acompañaban las decisiones arbitrales ni tampoco las ideas que reflejaban en el terreno de juego. Hermoso, Llorente o Trippier buscaron el empate. El Sevilla, con todo el equipo en el área defendiendo, consiguió sacar los tres puntos y revoluciona La Liga. El Atlético ya no puede fallar y aún tiene por delante el duelo ante el Barça.

Sevilla 1-0 Atlético de Madrid

Sevilla: Bono; Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos, Acuña; Fernando, Jordán (Gudelj, m.87); Suso (Papu Gómez, 77'), Rakitic, Ocampos (Franco Vázquez, 87'); y De Jong (En-Nesyri, 62').

Atlético de Madrid: Oblak; Trippier, Giménez, Felipe, Hermoso (Herrera, 73'), Lodi (Correa, 34'); Llorente, Koke, Saúl; Lemar (Kondogbia, 73') y Luis Suárez.

Gol: 1-0, 70' Acuña.

Árbitro: Jesús Gil Manzano (Comité Extremeño). Amonestó a los visitantes Felipe (5'), Luis Suárez (56'), Llorente (78') y Kondogbia (86') y a los locales Diego Carlos (9') y Acuña (56').

Incidencias: Partido de la vigésima novena jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán. Sin público.