Este sábado se disputa en la capital española la final de la Champions League 2018/2019. El Wanda Metropolitano es testigo del partido que enfrenta a Tottenham y Liverpool con el objetivo de hacerse con el trono que ha poseído el Real Madrid en los tres últimos años. Los precios por un alojamiento se han disparado, pero también algunos quieren hacer su particular agosto con las entradas.

Los aficionados comienzan a llegar a Madrid así como aquellos que quieren aprovechar la final para engañar a terceros. La Policía Nacional ha detenido a tres de estos últimos. De origen italiano, a los detenidos se les incautaron planos plastificados del estadio del Atlético de Madrid, 21 entradas falsas, 3.180 euros en efectivo y cinco sobres con el membrete de la Champions League.

El dispositivo dio inicio por una llamada a la sala 091, ahí se informaba que algunos individuos se habían personado en la oficina de acreditaciones para denunciar que algunos hombres se encontraban en las inmediaciones del Wanda Metropolitano con el objetivo de vender entradas para la final de la máxima competición continental a nivel de clubes.

El Wanda Metropolitano, listo para la final de la Champions League Reuters

Los agentes acudieron al escenario de la esperada final de la Champions League y allí comprobaron que la descripción de los sujetos se ajustaba a la perfección con los varones que se encontraban en las inmediaciones del Wanda. Uno de ellos intentó huir, siendo interceptado por uno de los policías, mientras que otro pretendió deshacerse de los cinco sobres con el emblema de la competición.

Comprobación de entradas

Luego de estos incidentes, se pasó a la comprobación de las entradas, comparándolas con otras auténticas que se estaban vendiendo en esos momentos. Después de cotejar que eran falsas, se pasó a una segunda prueba a través de una aplicación móvil con los códigos QR de las entradas, no derivando ninguno a las páginas web. También se realizó otra comprobación más a través de la PDA de acceso que se usa para entrar al Metropolitano. Esta última prueba tampoco reconoció como verdaderas las entradas de los varones de origen italiano, con la posterior detención de los tres para trasladarlos a comisaría.

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