La Comunidad de Madrid reforzará las medidas de seguridad en el estadio del Rayo Vallecano, tras la caída de un niño el pasado fin de semana. Lo ha anunciado el vicepresidente regional, Pedro Rollán, durante una visita a la a la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) Arroyo Culebro Cuenca Media-Alta.

Las obras en el estadio del Rayo Vallecano, propiedad de la Comunidad de Madrid, comenzaron inmediatamente después de que terminara La Liga, el pasado 4 de junio. Rollán ha explicado que se ofreció al club que los dos primeros partidos del calendario pudieran celebrarse fuera del campo para no interferir en la ejecución de las obras, pero el Rayo decidió que "quería celebrar todos y cada uno de los encuentros, empezando por el primero, en su campo".

"Por muchas medidas de seguridad que se pongan, hemos comprobado como en el pasado fin de semana un niño se ha caído en el entorno de unas vallas", ha indicado el vicepresidente regional. El director general de Deportes de la Comunidad de Madrid, Javier Orcaray, ha visitado el estadio esa semana de la mano de la empresa constructora para "reforzar las medidas de seguridad".

Inversión de 1,2 millones de euros

Rollán ha mostrado la intención de la Administración regional de que en los próximos partidos que se celebren se hayan redoblado los esfuerzos en materia de seguridad. La Comunidad de Madrid ha invertido 1,2 millones de euros en la fase inicial de la reforma del estadio del Rayo Vallecano con el objetivo de subsanar los desperfectos para poder pasar la Inspección Técnica de Edificios (ITE).

Los trabajos están dirigidos a mejorar la accesibilidad al estadio, tanto desde el exterior como desde el interior del recinto, a los graderíos principales. Además, incluyen actuaciones para paliar los problemas de humedades detectados en distintos puntos del estadio, sobre todo, en los graderíos bajos del edificio.