“¿Por qué han llamado a San José? ¿Y por qué a Mario Gaspar?”. Esto lo pueden escuchar en cada bar u oficina. ¿La razón? Ya saben, España es así. O mejor dicho, los españoles son así: entrenadores en potencia sin título -como Zidane en aquellos días- y seleccionadores en la intimidad. En definitiva, opinadores con 'razón' y que serían capaces de ganar un Mundial con una caña en la mano y una tapa de bravas sobre la mesa. Pero a la hora de la verdad tomar decisiones es más complicado -pregúntenle a Del Bosque- y a menudo esos 'extras' que son criticados y despreciados por la afición (véase Nacho o Bartra) son a la postre básicos en la consecución de títulos. ¿Quieren pruebas? Las hay -en mayor o menor medida- en cada uno de los éxitos de La Roja en los últimos años.



EUROCOPA DE 2008



En cualquiera de los sentidos, la participación de España en la Eurocopa de 2008 fue toda una sorpresa: La Roja no estaba entre las favoritas y Luis Aragonés había llegado fuertemente criticado por su gestión en la fase de clasificación -incluso al borde de la destitución-. Sin embargo, se acabó consiguiendo el objetivo. ¿Cómo? Con un buen bloque y unos cuantos extras que ayudaron en la consecución del título. Entre ellos, Juanito, Rubén de la Red, Sergio García, Güiza o el propio Senna.



La mayor sorpresa fue el centrocampista hispano-brasileño. Senna, que llegaba como jugador del Villarreal y con una edad avanzada (31 años), fue titular en aquella Eurocopa contra todo pronóstico y se convirtió, posiblemente, en uno de los mejores jugadores del torneo. El brasileño es el caso más paradigmático, pero también muchos otros ayudaron. Güiza disputó un partido en la primera fase y participó en los cuartos, las semifinales y la final. En total, estuvo sobre el campo 175 minutos y marcó dos goles. Y Juanito, Sergio García y De la Red -marcó un gol- jugaron contra Grecia en la la fase de grupos.



MUNDIAL DE 2010



España no llegaba como clara favorita al Mundial, pero sí con buenas sensaciones tras ganar la Eurocopa. Por tanto, la convocatoria se llenó de menos extras que en la Eurocopa de 2008. Aun así, hubo dos extras bien claros. El primero de ellos, Fernando Llorente, olvidado tras la cita de Sudáfrica. El hoy delantero del Sevilla fue básico en la consecución de la victoria contra Portugal de octavos de final. Saltó al césped en el segundo tiempo para sustituir a Torres y fue un verdadero calvario para la defensa lusa. Tanto es así, que gracias a él, Villa marcó el gol de la victoria y el pase a cuartos.



En otro orden, Jesús Navas -que había sido requerido por Luis Aragonés en 2006 y 2008 y no había ido por problemas de ansiedad- decidió acudir al Mundial de 2010. Y fue básico en la consecución del título. El hoy extremo del Manchester City entró en la segunda mitad para sustituir a Pedro e inició la jugada del gol de Iniesta contra Holanda en el minuto 116 de la prórroga.



EUROCOPA DE 2012



Quizás la mejor convocatoria de Del Bosque en términos de calidad fue la de la Eurocopa de 2012. En ella, casi todos los jugadores podían ser titulares, pero también acudió Negredo, que llegó a jugar tres partidos: dos saliendo desde el banquillo y otro como titular. Y el otro que sorprendió a todos fue Jordi Alba, al que le tocó cubrir el hueco dejado por Capdevila, y lo hizo de la mejor manera posible: fue titular y marcó el segundo gol contra Italia (4-0) en la final tras recorrer medio campo y batir a Gianluigi Buffon. Es decir, de alguna forma, también fueron básicos para que España acabara levantando la triple corona.



EUROCOPA DE 2016



Obviando el Mundial de 2014 por razones evidentes: ni los secundarios ni los extras ni nadie podrán acabar con la mala imagen generalizada de España. Esta vez, la convocatoria de la 2016 se parece bastante más a aquella de éxitos primigenios orquestada por Luis Aragonés. Entre los nuevos, Mario Gaspar, Mikel San José, Marc Bartra, Sergi Roberto, Nacho o el propio Aduriz, que en principio no iba a ir, pero finalmente se ha ganado una plaza para los amistosos contra Italia y Rumanía. ¿Serán decisivos este verano? He ahí la cuestión. Sólo entonces se podrá calibrar si Del Bosque ha acertado con sus apuestas. Hasta entonces toca callar y elucubrar en el bar. No vaya a ser que…

Noticias relacionadas