El Valencia Basket cayó este jueves en la pista del CSKA Moscú (81-70) ante el que compitió bien los tres primeros cuartos, especialmente en la primera parte, pero al que le faltaron energías y argumentos en el último cuarto para ponerle en problemas, en parte por el excelente porcentaje de tres que tuvieron los rusos (64%). [Narración y estadísticas: CSKA 81-70 Valencia Basket]

Dos triples de Voigtmann abrieron el marcador pero el Valencia no se amilanó. Con Van Rossom anotando y dirigiendo y un Doornekamp pletórico llegó a ponerse por delante y aunque no logró mantener esa posición por su bajo porcentaje de tres puntos, su seriedad defensiva sí que le permitió mantener a tiro al CSKA.

De hecho, con la entrada en la pista de la rotación de ambos equipos, el conjunto español volvió a adelantar a los locales momentáneamente pero Sant-Ross y Koufos reaccionaron y el choque se convirtió en un ágil intercambio de canastas, con ambas defensas a la baja.

Ambos equipos reconstruyeron sus quintetos en los últimos minutos en los que la falta de claridad ofensiva del Valencia unida a la capacidad de desborde de Mike James dio una pequeña ventaja al CSKA.

Trató el equipo moscovita de apretar su defensa en el arranque pero la buena circulación del Valencia y la gran labor defensiva de Vives y de Labeyrie en el rebote le permitió aguantar el tipo unos minutos con los puntos de Van Rossom aunque perdiendo algo de fuelle.

Con el belga bien defendido y cansados, los visitantes no encontraron la forma de anotar pero apareció Doornekamp y con un triple y una asistencia logró mantener a flote a su equipo.

La sociedad entre Colom y Ndour le dio otra salida al Valencia ante su mal porcentaje de triples pero se quedó muy corto porque apenas dueño un par de jugadas y el bajón de intensidad defensiva facilitó a los locales abrir una brecha ya preocupante (71-58, m. 33).

La segunda unidad rusa, con Hackett de punta de lanza, no levantó el pie y al Valencia le faltaron fuerzas y argumentos para un último intento.

Un nuevo triple de Voigtmann, el quinto de cinco intentos, alejó aún más al equipo ruso y le dio margen para relajarse en los últimos minutos sin poner en peligro su victoria pese a los puntos de Vives, a los que contestó Hackett, de nuevo desde la línea de tres.