España ha arrancado el Eurobasket femenino con paso firme. Si alguien esperaba una bajada de pistón tras cuatro veranos consecutivos rindiendo al máximo nivel (oro europeo en 2013, plata mundial en 2014, bronce continental en 2015 y plata olímpica en 2016), no conoce bien a las chicas de Lucas Mondelo. Por mucho que la humildad les honre y que no se sientan favoritas en este torneo, estarán en la pelea por las primeras plazas salvo desastre. Después de acabar con Hungría el viernes en el primer partido de grupos (48-62), Ucrania también acabó hincando la rodilla ante las nuestras este sábado (76-54). La primera plaza de la fase preliminar, que supondría contar con una eliminatoria menos y más días de descanso, está al alcance tras las buenas sensaciones de estos primeros compases.

Dos de las protagonistas españolas en el duelo inaugural repitieron en el segundo encuentro: Alba Torrens y Sancho Lyttle. La jugadora balear no para de demostrar día tras día, partido tras partido, por qué es una de las mejores baloncestistas de Europa e incluso del mundo. Su inspiración en ataque (no alcanzó los 30 puntos de milagro) resultó fundamental para vencer la resistencia ucraniana.

El combinado dirigido por Volodymyr Kholopov logró meterse en el partido tras un gran inicio de las nuestras, peleó con garra durante el segundo y el tercer cuarto y llegó a intentar la remontada en los últimos minutos. Las ucranianas buscaron la épica con Iagupova, un santo y seña con muchísimos puntos en las manos, que protagonizó un bonito duelo anotador con Torrens (23 por 26 de la española). Udodenko tampoco se quedó atrás gracias a su buena muñeca desde el triple. Sin embargo, su ataque se redujo a este dúo, nada que ver con el de España.

Lyttle volvió a presentar candidatura a ser la mejor pívot del campeonato. Como ya hiciera ante Hungría y con una facilidad pasmosa para capturar rebotes. Cada vez que Sancho acude a la llamada del equipo nacional, los enteros se disparan. Con un doble-doble casi más propio de la NBA que de la WNBA en la que milita (18-18), España ganó medio partido gracias a la presencia interior de la sanvicentina. No sólo por su aportación fundamental en defensa, sino también por lo que generó en la parcela ofensiva.

Pero la selección empezó a despegar definitivamente en el marcador, pudo dar el paso crucial para quedarse muy cerca del primer puesto del grupo A, gracias a Marta Xargay. Sus triples en el tercer cuarto señalaron el camino de la victoria. Al igual que su intensidad defensiva. Es el mérito de estas chicas: todas van a una a un lado y a otro de la cancha. No hay que olvidarse de la dirección de juego que aportaron la capitana Laia Palau, Silvia Domínguez y Anna Cruz. Las asistencias también marcaron la diferencia, además de los puntos desde el banquillo.

En definitiva, Ucrania tuvo que capitular ante el partido mucho más completo de España. El lunes, a eso de las 18:00, tocará afrontar el último partido de la fase de grupos ante República Checa, anfitriona de este Europeo. Si todo sigue como hasta ahora, las chicas de Mondelo quedarían exentas de disputar los octavos de final (primeras de grupo) y pasarían directamente a unos cuartos que se dirimirían el jueves. Su rival saldría del grupo C o del D, ambos muy disputados y en los que todo puede pasar entre Grecia, Francia, Eslovenia y Serbia por un lado y Bélgica, Rusia, Letonia y Montenegro por otro.

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