El mundo del ajedrez vive una profunda conmoción tras la muerte del gran maestro estadounidense Daniel Naroditsky, ocurrida de forma inesperada a los 29 años.
Su fallecimiento ha desatado una ola de homenajes, tristeza y también indignación.
La Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) ha anunciado la apertura de una investigación sobre los ataques públicos que el excampeón mundial Vladimir Kramnik dirigió contra él en los meses previos a su muerte.
La noticia ha golpeado especialmente a una comunidad que veía en Naroditsky no solo a un jugador brillante, sino a un divulgador apasionado que había logrado acercar el ajedrez a cientos de miles de personas a través de sus streamings.
Su canal superaba los 500.000 suscriptores en YouTube y más de 340.000 seguidores en Twitch, donde era conocido cariñosamente como Danya.
Una de las voces más queridas
El Charlotte Chess Center, club al que pertenecía, fue el encargado de anunciar su muerte el lunes con un comunicado en el que describía a Naroditsky como un "miembro muy querido de la comunidad ajedrecística, admirado y respetado por aficionados y jugadores en todo el mundo".
La familia confirmó el fallecimiento, aunque no se ha revelado la causa, limitándose a calificarlo de "inesperado".
Naroditsky fue un talento precoz. Ganó el Campeonato Mundial Sub-12 en 2007, se convirtió en gran maestro siendo aún adolescente.
Fue autor de varios libros de estrategia ajedrecística, entre ellos Mastering Positional Chess, publicado a los 14 años.
Además, era columnista del New York Times desde 2022 y se desempeñaba como entrenador en Charlotte, Carolina del Norte, tras graduarse en la Universidad de Stanford.
Hikaru Nakamura, número dos mundial y amigo personal del fallecido, expresó su dolor en redes sociales.
"Inspiró a cientos de miles de personas a jugar ajedrez. No lo hacía por dinero, sino por pasión", dijo.
En declaraciones a la BBC, añadió: "He jugado más de mil partidas con Daniel. Era tranquilo, incluso en un mundo tan competitivo".
Daniel Naroditsky
La controversia con Kramnik
La tristeza por la muerte de Naroditsky se mezcla con la controversia generada por las acusaciones de Vladimir Kramnik, campeón del mundo entre 2000 y 2007.
El gran maestro de ajedrez ruso había señalado públicamente al estadounidense en los últimos meses de haber hecho trampas en competiciones en línea.
Kramnik, que se autodefine como un "defensor del juego limpio", lanzó sus acusaciones en redes sociales y foros de ajedrez, sin aportar pruebas concluyentes.
Naroditsky negó tajantemente las acusaciones y en su última transmisión en Twitch insinuó que la situación lo había afectado emocionalmente.
Poco después de conocerse su muerte, la FIDE confirmó que estaba "examinando los ataques públicos de Kramnik", según declaró su director ejecutivo, Emil Sutovsky, a la agencia Reuters.
Sutovsky explicó que el organismo "está analizando los comentarios y la responsabilidad ética de quienes hacen acusaciones públicas sin fundamentos".
Condena de la comunidad ajedrecística
Las reacciones no se han hecho esperar. Magnus Carlsen, campeón del mundo durante una década, calificó el trato recibido por Naroditsky como "horrible".
El indio Nihal Sarin fue aún más contundente al afirmar que "Kramnik necesita pagar por lo que está haciendo", y añadió: "Las acusaciones sin base y el acoso público le causaron una presión y un dolor inmensos".
El mensaje de Sarin, ampliamente compartido en redes sociales, reflejaba la indignación general en la comunidad.
"Esto tiene que parar. Cuando figuras respetadas difunden alegaciones infundadas sin rendir cuentas, se destruyen vidas reales", escribió el joven gran maestro.
La jugadora británica Jovanka Houska también aplaudió la decisión de la FIDE de abrir una investigación.
"No se puede permitir que cualquiera acuse a otra persona de hacer trampas sin consecuencias. No debe haber juicios públicos en las redes sociales", afirmó en declaraciones a la BBC.
Kramnik se defiende
Vladimir Kramnik, por su parte, ha asegurado que no hará comentarios sobre la investigación hasta que el presidente de la FIDE, Arkady Dvorkovich, se pronuncie oficialmente.
No obstante, en declaraciones a Reuters subrayó que consideraba la muerte de Naroditsky "una tragedia que debe ser investigada por la policía" y afirmó estar "dispuesto a proporcionar toda la información necesaria".
El ruso también advirtió que emprenderá acciones legales contra quienes lo culpen falsamente.
En su cuenta Twitter, escribió: "Sin duda, esta tragedia debe ser investigada por la policía; hay demasiados intereses económicos importantes como para asumir que fue solo un incidente".
La postura de Kramnik ha generado aún más controversia, pues muchos consideran que su insistencia en vincular la muerte con supuestos intereses ocultos reaviva el clima de sospecha y tensión que afectó profundamente a Naroditsky en vida.
El legado de un maestro
Más allá de la polémica, Daniel Naroditsky deja una huella indeleble en la historia moderna del ajedrez.
Fue un jugador excepcional, pero sobre todo un comunicador capaz de hacer que millones de personas se enamoraran del juego.
Sus vídeos, explicaciones didácticas y su estilo amable lograron romper barreras generacionales y culturales.
Su amiga y también gran maestra Nemo Zhou lo definió como un "historiador del ajedrez" con una memoria prodigiosa para las partidas clásicas.
"Tenía una manera de hacer que el ajedrez fuera divertido. Sin personas como él, yo habría abandonado el juego a los 17 años", confesó.
Numerosos aficionados de todo el mundo han compartido mensajes de admiración y dolor.
La joven británica Zara Graham, de 20 años, resumió el sentimiento general: "Nunca lo conocí en persona, pero sus vídeos me hicieron amar el ajedrez. Me rompió el corazón enterarme de su muerte".
