"Creíamos que se iba a solucionar fácilmente y no ha sido así. Es una pena". Las palabras del ministro de exterior José Manuel García Magallo resumían siete días en los que la familia de Ángel María Villar no ha podido hacer nada por salvar a la sobrina del presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), cuyo cadáver ha aparecido en una morgue de Toluca (México) después de ser víctima de un secuestro exprés.

Fue el martes 13, según ha informado el ministro en el programa La Brújula de Onda Cero, cuando la joven, de 39 años, fue asaltada cuando sacaba dinero. Desde ahí, lo que suele ser habitual en este tipo de secuestros en Centro y Sudamérica: un cajero detrás de otro intentando conseguir la mayor cantidad de dinero en efectivo posible antes de contactar con la familia para pedir un rescate.

Una vez los secuestradores contactaron con la familia, ésta comunicó la situación a la embajada española, cuyo agregado de interior recurrió a la Unidad Antisecuestros de la Policía mexicana y comenzaron el protocolo habitual. Además, "el marido de la joven y un primo suyo, Gorka (exsecretario general de la Conmebol e hijo de Ángel María Villar), llegaron a México con dos policías españoles (posiblemente negociadores) para intentar resolver el tema".

Según informa Cope, los secuestradores exigieron un rescate de 90.000€ y la familia pagó. "Se había pagado la cantidad, aunque inferior a la que pedían y creíamos que iba a salir sana y salva", afirmó el ministro. Según avanzaron los días y no consiguieron resultados "comenzaron a recorrer diferentes depósitos de cadáveres y, por desgracia, encontraron el cadáver en Toluca".

Toluca, la capital del secuestro

Toluca es la capital del Estado de México, la entidad que rodea la capital del país. Situada a unos 75 kilómetros de la ciudad de México, tiene medio millón de habitantes. El Estado de México, de donde fue gobernador Enrique Peña Nieto antes de llegar a la presidencia, está considerado uno de los más peligrosos del país. Gobernado por Eruviel Ávila Villegas, priista como Peña Nieto, en 2015 quedó por encima de Guerrero, cuya capital suele salir en la lista de ciudades más peligrosas del planeta, si bien tiene cuatro veces más población.

La media en el Estado fue de 13,6 en la tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes, según la organización civil Semáforo Delictivo. Toluca, con su 6,1, es la más baja de las ciudades reseñadas. En el primer semestre del 2016, hay registrados 1.326 homicidios. De momento, ni la Policía del Estado ni la Procuraduría General de Justicia del Estado de México comentan el caso.