España se quitó la espina de la derrota contra Portugal en el Martín Carpena de Málaga imponiéndose a la República Checa 87-73 en una noche en la que tuvo un papel relevante el base malagueño Mario Saint-Supéry, el tercer español con más minutos en pista.
Era la segunda parada consecutiva en Málaga para la preparación del Eurobasket 2025 que arranca a finales de agosto. Tras el chasco de la inesperada derrota contra Portugal, esta vez la selección de Scariolo comandó el duelo contra los checos desde el principio.
Esta vez Alberto Díaz no salió de titular en la formación española. Tampoco lo hizo Mario Saint-Supéry, pero no le hizo falta para ser importante sobre la pista.
El ya jugador de la Universidad de Gonzaga de la NCAA estuvo 18:44 minutos sobre la pista del Carpena. Anotó diez puntos, capturó dos rebotes y repartió dos asistencias.
En su debe, las cinco pérdidas, el que más de la selección española. Fue el base que más minutos de los tres estuvo en pista, por delante de Larrea y Alberto Díaz. Se coló a última hora por la baja de Lorenzo Brown, pero no quiere dejar pasar la oportunidad.
El que tuvo menos protagonismo en esta jornada fue el capitán del Unicaja Alberto Díaz. El base malagueño no entró en el quinteto titular como sí lo hizo contra Portugal, y fue el jugador que menos minutos estuvo en la pista del Martín Carpena.
Díaz jugó 6:32 minutos y no anotó ningún punto delante de la afición malagueña. Pero si alguien conoce que donde brilla más Alberto es en los intangibles son Scariolo y la afición del Carpena.
Sima también tuvo poco protagonismo con 8:21 minutos sobre el parqué para dos puntos. Capturó dos rebotes.
España se va de Málaga con mejores sensaciones de las que ofreció en su primera cita el pasado martes. Con el público citado en el Carpena haciendo la ola.
Antes de la cita de los mayores, la España B se proclamó vencedora moral de este torneo Ciudad de Málaga al hacer lo que no pudieron hacer los primeros espadas, ganarle a Portugal.
Este combinado nacional adiestrado por Jaume Ponsarnau ha tenido un paso inmaculado por Málaga, con victorias contra la República Checa de Tomas Satoransky -no participó este jueves- y Portugal.
Ahora Scariolo tiene casi tres semanas por delante para ir afinando de cara al debut en Chipre contra Georgia el 28 de agosto.
La selección ha convertido Málaga en parada obligatoria en sus caminos de preparación de los grandes torneos.
