En un hecho sin precedentes, el Comité Nacional Español del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS) contesta al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte por la reforma que el Ayuntamiento de León (PP) está ejecutando en la Plaza del Grano. En la carta redactada por el organismo que vela por la protección del Patrimonio Mundial -a la que ha tenido acceso este periódico-, se da cuenta de un equipo ministerial que se atreve a mentir, desconocedor del patrimonio propio del Camino de Santiago, falto de interés y contrario a asumir sus responsabilidades en materia de conservación.

Todo arranca con el burofax al Director General de Patrimonio Histórico del Ministerio, Luis Lafuente, que mandó la plataforma ciudadana constituida para tratar de paralizar las obras que acabarían con la última plaza empedrada de Europa. Solicitaban su intervención para evitar la construcción de las aceras previstas en la fase segunda, previa a la modificación del seno de la plaza y a su esencia empedrada.

Las nuevas aceras desfigurarían el lugar y alterarían su configuración de manera irreversible. La respuesta llega tarde: la fase segunda se ha ejecutado y hasta Ciudadanos, socios de Gobierno del alcalde, lamentan la intervención, como aclaró su portavoz, Gemma Villarroel, a este periódico.

El Ministerio no protege 

Sin embargo, tanto la Plataforma Salvemos la Plaza del Grano como ICOMOS se sorprenden con la respuesta del ministerio del que es responsable Íñigo Méndez de Vigo: “La Plaza del Grano no forma parte del bien “Los Caminos de Santiago: Camino Francés y Caminos del Norte Peninsular”, tal como consta en la cartografía oficial elaborada en el año 2014”. Para la Subdirectora General de Protección del Patrimonio Histórico, Elisa de Cabo de la Vega, “sólo está protegido como elemento asociado al Camino el elemento central de la Plaza, es decir, la fuente”.

La Subdirectora informa que el Ministerio no tiene competencias en este asunto, porque la plaza no pertenece al Camino. Cabo de la Vega asegura que la Plaza del Grano se queda a 80 metros de la fachada de la iglesia de San Martín, elemento del Camino, que tiene una protección lateral de una anchura genérica de 30 metros. Según los actuales responsables del Ministerio, la Plaza del Grano no es un elemento propio del Camino por 50 metros y, por ello, excede a sus competencias.

La respuesta de Cultura acaba con una afirmación que ha hecho reaccionar a la presidenta de ICOMOS España, Begoña Bernal. De la Vega asegura en su escrito que “se tiene conocimiento de que ICOMOS reconsideró su informe inicialmente negativo”. Falso. La organización dejó bien claro que las obras suponen una “chapuza”, que acabarán con un hito único.

Rotundo: desfavorable

“No es aceptable tomar el nombre del Comité Nacional Español de ICOMOS en vano sin haber leído en sus justos términos el “informe” de ICOMOS, así como tampoco es mínimamente presentable afirmar que “se tiene conocimiento de que ICOMOS España reconsideró su informe inicialmente negativo en relación a la primera fase…”, replica Bernal a De la Vega.

La presidenta recuerda al Ministerio los términos en los que el organismo de referencia se ha posicionado: los valores y elementos del entorno de la plaza “se ven grave y radicalmente afectados por el proyecto”. E informa “desfavorablemente” del proyecto. No hay ninguna duda: negativo.

La contestación a Cultura no acaba ahí. La presidenta de ICOMOS “se siente absolutamente confundida al comprobar que es una primera autoridad del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte la que afirma por escrito que la Plaza del Grano no forma parte del bien Los Caminos de Santiago”.

Salvados por el núcleo urbano

Bernal cita el expediente de 1993 que sirvió para que el Comité del Patrimonio Mundial inscribiera el Camino en la Lista del Patrimonio Mundial: en los núcleos urbanos, el área de 30 metros de protección “se amplía”. “Este perímetro abarca básicamente los cascos antiguos de los núcleos de población y los elementos que por su interés histórico, cultural y paisajístico definen dichos enclaves”, puede leerse. Desde ICOMOS se hacen la siguiente pregunta: “Por cierto, ¿el Ministerio estaría dispuesto a afirmar que la peculiar Plaza del Grano, con su singular pavimento, no puede ser elemento con interés histórico, cultural y paisajístico?”.

Además, la institución advierte que es “del todo absurdo pensar que el aumento de nuevos caminos y lugares que llevan a Santiago provoquen la merma y depuración de información que valía en 1993”. Lo más curioso del asunto es que es el propio Ayuntamiento de León el que ha titulado a su proyecto de reforma: “Recuperación del Camino de Santiago y la Iglesia del Mercado con adecuación de espacios públicos en la ciudad de León”.

El ICOMOS aclara que se puede afirmar que León, el casco antiguo de la ciudad, es Patrimonio Mundial, por ser parte integrante del Camino de Santiago

“Afirmamos aquí que no puede decirse desde el Ministerio que la Plaza del Grano no está en el Camino de Santiago”, asegura rotundo ICOMOS. Cita la propia declaración de la UNESCO sobre la identificación y delimitación del mismo. “Gracias a la lectura del propio Expediente de Declaración del Camino de Santiago se puede afirmar que León, el casco antiguo de la ciudad, es Patrimonio Mundial, por ser parte integrante del Camino de Santiago, así como una serie de monumentos que no se encuentran en el centro histórico”.

Y vuelve a preguntarse, para sacarle los colores a Luis Lafuente y su equipo: “¿Cómo es posible que la administración pública no lo sepa? ¿Cómo es posible que el propio Ministerio de Cultura niegue o reniegue de lo que hizo en el expediente de declaración?”. Por eso ICOMOS solicita a la Dirección General de Bellas Artes y Patrimonio Cultural del Ministerio que “ejerza las acciones propias de su cometido para la conservación del patrimonio incluido en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO e impida que se pierda una parte del Camino de Santiago de la ciudad de León, como es la Plaza del Grano”.