“Yo soy una simple galerista y quiero volver el año que viene”. Comillas de Helga de Alvear, que reconoce con estas palabras haber accedido a la retirada de la obra de Santiago Sierra, “Presos políticos españoles contemporáneos”, por temor a ser vetada para la edición de 2019. Helga de Alvear es una de las galeristas creadoras de ARCO hace más de tres décadas y una de las personas más influyentes en la feria del arte contemporáneo, que ha amanecido con un episodio inédito en su historia: la retirada de una obra de arte por decisión política.

La injerencia sobre el contenido y la libertad de expresión del artista no había ocurrido hasta el momento y ha sido una decisión tomada de manera unilateral por el presidente del Comité Ejecutivo de IFEMA, Clemente González Soler, según asegura el director de ARCO, Carlos Urroz. Explica que el presidente le llamó alertado ante los artículos que la prensa publicó sobre la obra de Sierra y que le preguntó si era partidario de la retirada de la obra. “Me ha preguntado si me parecía bien y yo he contestado que no, pero hay tres niveles de decisión por encima del mío”, cuenta Urroz, que confirma la injerencia política sobre el trabajo del artista español más reconocido.

"No quiero problemas"

La galerista Helga de Alvear ha contado a los medios que le llamó el presidente y le dijo que no podía mantener expuesta esa obra. “Yo no quería problemas, no es mi responsabilidad. No quieren líos y yo lo que quiero es vender. Nunca hemos retirado una obra de Santiago Sierra”, dice la galerista.

Los operarios de IFEMA llegaron a la mañana, tras la charla con la galerista, y descolgaron el mural de casi treinta retratos pixelados de esos presos políticos. “La obra es una presa política, está en alguno de los almacenes del recinto ferial”, asegura. La Policía ya estuvo antes de los políticos del IFEMA y no vieron ningún problema en ella.

El trabajo de Santiago Sierra se exponía de esta manera antes de ser censurado.

IFEMA es una entidad dirigida por Comunidad de Madrid, Ayuntamiento de Madrid y Cámara de Comercio a partes iguales (31%) y Fundación Monte de Piedad (7%). Ni la Comunidad de Madrid ni el Ayuntamiento de Madrid eran conscientes de la decisión, tal y como han informado a este periódico. De hecho, el Ayuntamiento de Madrid ha pedido el rescate de la obra para que sea expuesta de nuevo. Este periódico ha podido saber que Luis Cueto, segundo del Ayuntamiento, ha llamado al director de IFEMA, Luis Eduardo-López Puertas, para aclararle que no estaban de acuerdo con la decisión. Han convocado una comisión de urgencia para decidir al respecto.

Durante la mañana se ha celebrado una junta de gobierno de urgencia (y virtual) en la que la Comunidad de Madrid y la Cámara de Comercio han ratificado la retirada de la obra. El ayuntamiento y la fundación Monte de Piedad han votado en contra, tal y como ha podido saber EL ESPAÑOL.

Dimisiones a la vuelta

Santiago Sierra ha dicho que esto es un ataque a la libertad de expresión, que ha recibido la noticia con “sorpresa y decepción”, que es una falta de respeto a la inteligencia del público de ARCO y a su galerista, pero que un acto como éste es propio del “clima de persecución que estamos sufriendo los trabajadores de la cultura”. Carlos Urroz está de acuerdo con Sierra, dice que “tiene todo el derecho ha decirlo”. ¿Es un ataque a la libertad de expresión? “No se puede retirar una obra de una pared. Yo nunca lo habría hecho”. ¿Se siente menospreciado por la decisión? “No, para nada”. ¿Piensa dimitir? “Mi cargo siempre está a disposición de IFEMA”.

Carlos Urroz es el primer director en Arco que debe retirar obra de un stand, ¿en qué posición le deja? “Yo no he retirado nada”. ¿Lo califica de censura? “Es una conversación entre el presidente de Ifema y una galerista, en la que se le dice que esa obra puede ofender a gente. Cada galerista decide lo que pone y lo que quita”. ¿Quiere decir que Helga es cómplice? “Ha hecho lo que ha querido”.

"La decisión es de Helga"

IFEMA ha lanzado un comunicado oficial para señalar que ha retirado la obra, “respetando la libertad de expresión”, para no desviar la atención de lo que es importante en la feria. Y ha logrado todo lo contrario. “Ha creado más atención que desviarla. Yo lo he desaconsejado encarecidamente. El presidente ha llamado a Helga de Alvear y la ha convencido para retirarla”, añade Urroz.

El dierctor del MACBA, Ferran Barenblit, ha señalado que “el arte es un espacio de libertad y no hay tema que no se pueda no tratar. Santiago Sierra estaba abriendo un debate y ha sido apartado. Yo siempre defenderé la libertad del artista. Hay censura en ARCO porque alguien ha decidido que esa obra no se puede ver”, ha explicado. “El arte siembre debe incomodar y un político debe respetar la libertad del artista. Una retirada como esta no debería pasar jamás. Me parece muy grave”.

Después de la censura contra Santiago Sierra, sabemos que el arte es un espacio de libertad, ¿pero y ARCO? ¿Qué es ARCO?