Hace justo un año, en noviembre de 2024, Alfonso Aragón Sac, conocido artísticamente como Fofito (75 años), afrontó la que, sin duda, ha sido la etapa más complicada de su vida a nivel de salud. Una neumonía lo mantuvo 44 días ingresado. Fue aquella una época muy delicada.
Fofito, uno de los 'payasos de la tele', inmensamente querido por el público, preocupó a propios y extraños tras este revés, y su evolución médica fue seguida con especial intensidad. Él, a sus 74 años, se veía obligado a cancelar trabajos por primera vez en su vida.
No obstante, el artista circense se recuperó satisfactoriamente. "Se me fue la olla por completo. Si no fuera por mis hijas y mis sobrinos, estaría ya en la caja que no se abre", confesó él mismo en el programa de Sonsoles Ónega (47), en la gran entrevista tras su vuelta.
Fofito en una imagen de redes sociales.
"Estuve con un pie en el otro barrio. Me han dicho que deje de fumar, y después cogí una especie de virus, que eso fue por lo que me ingresaron. Le tengo que dar las gracias al doctor que me ha tratado", relató entonces el hijo del recordado Fofó y sobrino del mítico Miliki.
Agregó: "A lo mejor bajo el nivel de trabajo. No me voy a hacer otra vez una gira de tres años en el circo, pero fechas señaladas y que me llamen para hacer algo para recaudar fondos". Según ha podido conocer EL ESPAÑOL, es cierto que su ritmo laboral no es el mismo.
Pero su pasión por el trabajo, por el espectáculo, sigue intacta en él. Vive Fofito más centrado en su familia y un poco menos sobre el escenario. Los Aragón son una saga unida y así lo demostraron durante la recuperación de Fofito.
El payaso estuvo rodeado de su mujer, Marianela Fernández-Cuervo, y de sus tres hijas, Mónica, Mayte y Nela. Ellas, sus cuatro asideros emocionales, son capitales para Fofito.
Mónica Aragón y 'Fofito' en una imagen de archivo.
En otro orden de cosas, Alfonso ha sido un hombre "currante, de los que se ha pateado España sin rechistar". Por tanto, a nivel económico, se podría colegir que Fofito ha amasado una buena fortuna. Y así pudiera ser, pero no se traduce, a priori, en su patrimonio.
Este periódico ha podido confirmar que Fofito tiene una casa en propiedad, en Madrid, desde hace años. Un inmueble donde reside junto a su mujer. Es su hogar, el que consiguió tras años de trabajo y sacrificio. No se trata, se aclara, de algo ostentoso: Alfonso es un hombre de pocos lujos.
En lo concerniente a sus inversiones empresariales, Alfonso tiene dos entidades a su nombre, según queda registrado en Informa, la empresa española líder en información comercial, financiera y empresarial.
Las empresas que están vinculadas a Alfonso Aragón Sac son: Hostelería y Ambiente S.A y Fito-Mani S.L. Ambas están bajo una sanción administrativa tras ejecutarse el Cierre de Hoja Registral.
En la primera entidad, el Cierre de Hoja Registral se aplicó en 2017; y en la segunda, en 2022.
La primera de las entidades está centrada en "establecimientos de bebidas", y la segunda en "fabricación de productos electrónicos de consumo".
Fofito y la familia
Fofito en una fotografía de archivo.
Un año después de su bache de salud, Fofito ha encontrado en su familia el mayor sostén para su recuperación. El veterano artista ha agradecido públicamente el cariño recibido, pero ha destacado especialmente el papel fundamental que ha jugado su entorno más cercano.
Su esposa, con quien lleva más de cuatro décadas de matrimonio, ha estado a su lado en todo momento, acompañándolo en el proceso de rehabilitación y brindándole gran soporte emocional.
La historia de amor entre Fofito y su mujer es una de esas que se forjan lejos del foco mediático, pero que resisten el paso del tiempo. Se conocieron en los años 70, cuando él ya era una figura consolidada del espectáculo infantil, y desde entonces han formado un tándem inseparable.
Ella, siempre discreta, ha preferido mantenerse alejada de los medios, pero ha sido una presencia constante en la vida del artista, tanto en los momentos de éxito como en los más difíciles.
El legado familiar de Fofito también se extiende a sus hijas, que han seguido caminos profesionales distintos pero con un fuerte vínculo con la creatividad. Su primogénita, Mónica, es también artista y, de hecho, ha trabajado con él en su espectáculo, Viva el circo.
La mediana de ellas, por su parte, ejerce de mánager en una conocida agencia. La menor también ha coqueteado con la actuación, aunque mucho menos que su hermana Mónica. A día de hoy se dedica a su profesión, la psicología.
Durante su ingreso, como pudo conocer este periódico, Fofito también recibió el apoyo y atención de familiares y amigos que lo visitaban y llamaban constantemente. Sus seguidores -y así se lo hacían saber en sus rede sociales- también le enviaban constantes mensajes de cariño.
Huelga decir que Alfonso Aragón, Fofito, nace en una familia de artistas. Es hijo de Alfonso Aragón Bermúdez, el payaso Fofó.
En España se hizo popular en los años 70 gracias a los Payasos de la tele, junto a Gaby, Fofó y Miliki, con quienes había grabado ya algunas películas, como Había una vez un circo y Los padrinos.
