Publicada
Actualizada

Casi dos años han transcurrido desde que una revista del corazón publicara unas fotografías de Genoveva Casanova (48 años) y el hoy rey Federico de Dinamarca (57) paseando por Madrid. Un material gráfico que cambió la vida de ambos y, de entrada, zarandeó su estabilidad mediática.

Fueron tiempos durísimos para la mexicana y las instantáneas, además, desembocaron, cuentan las voces malintencionadas, en la abdicación de la reina Margarita (85) y la subida al trono de Federico X. En aquel tiempo, además, Genoveva sufrió una embolia pulmonar.

Una embolia que le causó un infarto pulmonar y un derrame. Un revés que vino a mermar su ya delicada salud emocional. Casanova defendió que aquellas fotografías, además, se vendieron a la sociedad con una intencionalidad que no era tal.

La mexicana en un acto público en abril de 2019. Gtres

Ha sostenido una y otra vez desde entonces en la amistad que la unía al Rey. En esa línea, la exmujer de Cayetano Martínez de Irujo (62) consideró que la difusión de dichas imágenes vulneró su derecho a la intimidad y dañó gravemente su imagen personal y profesional.

En este tiempo, Casanova ha tratado de reponerse, de seguir. Dijo 'sí' a concursar en El Desafío, un programa que, cuentan quienes lo saben, le ha cambiado la vida. Llegó en el momento idóneo.

Ahora, cuando la tranquilidad parecía haberse instalado en la vida de Casanova, este pasado lunes, día 22, comenzó el juicio por las fotografías. Más allá de los pormenores de este litigio, EL ESPAÑOL ha podido confirmar un extremo clave en este trance vital para Genoveva.

La colaboradora de televisión ha abandonado la casa donde vivía, en régimen de alquiler, y fue el epicentro de las instantáneas con Federico de Dinamarca.

Así lo avanzó la periodista Beatriz Cortázar en Informalia hace unos días. Conviene recordar que el actual Rey fue inmortalizado en las inmediaciones del domicilio de Genoveva.

Genoveva Casanova en un acto público. Gtres

Pues bien, en ese inmueble ya no habita la mexicana. Fue hace aproximadamente dos semanas, según los cálculos que se hacen a este diario, cuando la hija de Amina (24) y Luis Martínez de Irujo (24) terminó la mudanza y cerró una etapa importantísima en su vida.

Situada en el exclusivo barrio de los Jerónimos, junto al parque de El Retiro en Madrid, la vivienda de Genoveva Casanova dispone de más de 200 metros cuadrados.

Se encuentra en una de las zonas más cotizadas de la capital, donde el precio del metro cuadrado supera los 6.000 euros y las viviendas de más de 100 metros cuadrados pueden alcanzar el millón de euros.

Con tres habitaciones, dos baños y un amplio salón con vistas, el inmueble destaca por su estilo clásico, techos altos, suelos de parquet y una decoración que mezcla piezas modernas con guiños coloniales.

En los últimos días, camiones de mudanza han sido vistos en el portal. Explican, como justificación de esta mudanza, que Genoveva está en un período de cambios. Necesita cambiar de aires.

Esto no quiere decir que vaya a abandonar Madrid; la capital de España seguirá siendo su centro de operaciones y es donde está su mayor fuente de trabajo.

Su intención es buscar otro inmueble, mucho más adecuado a este momento por el que transita y, sobre todo, que tenga mayor privacidad para su día a día, en la medida de lo posible.

De momento, la también empresaria ha viajado hasta México, donde reside parte de su familia. Genoveva, huelga decir, viaja mucho a su país natal. De hecho, allí fue donde se refugió después del escándalo de sus fotos con Federico X.

Se trata de un viaje temporal, como conoce EL ESPAÑOL, "de unos días para poner tierra de por medio". A su regreso, retomará su vida en la capital de España. Quien lo sabe detalla que hay algún proyecto televisivo en cartera para ella, después de la quinta edición de El Desafío.

En otro orden de cosas, volviendo a la demanda que interpuso Genoveva, este medio también puede confirmar que fue admitida a trámite en junio de 2024. 400 páginas conforman una demanda que pretende revolucionar el mundo de la crónica social.

Ya desde un principio Casanova quiso dejar claro que su relación con Federico de Dinamarca no tenía ningún tinte extramatrimonial, y que simplemente eran amigos.

"Quiero dejar bien claro que no tengo relación alguna con él, como se está dejando caer. Somos amigos y las fotos no demuestran nada. Salvo para quien quiera tergiversar las imágenes y ver donde no hay. Tenemos amigos comunes y yo no voy contando quiénes son mis amistades", expresó ella.

Fuerte vínculo con Cayetano

Cayetano y Genoveva, en una fotografía tomada en 2020, en Madrid. Gtres

Genoveva y Cayetano se conocieron en Sevilla en 2001, cuando ella llegó como estudiante de intercambio. Apenas un año después, nacieron sus mellizos Luis y Amina, y en octubre de 2005 se casaron en el Palacio de Las Dueñas.

La duquesa de Alba fue madrina, y Genoveva lució un vestido de Manuel Mota inspirado en Grace Kelly. Aunque el matrimonio se disolvió en 2007, la relación entre ambos se mantuvo cordial.

Cayetano siguió apoyando a Genoveva en momentos difíciles, como el escándalo mediático por sus fotos con el entonces príncipe Federico de Dinamarca, e incluso le cedió el uso de fincas familiares como Las Arroyuelas y Arbaizenea, además de proporcionarle asistencia legal.

El próximo 4 de octubre de 2025, Cayetano se casará con Bárbara Mirjan (29), su pareja desde hace más de una década. La boda se celebrará en la iglesia del Cristo de los Gitanos en Sevilla, seguida de un banquete en Las Arroyuelas, finca que Genoveva decoró en el pasado.

Sin embargo, su presencia en el enlace es toda una incógnita. O más bien, una ausencia confirmada. Según fuentes cercanas, Genoveva no está invitada. Otras, en cambio, prefieren no aclarar este extremo. Sea como fuere, el vínculo entre Cayetano y Genoveva sigue fuerte.