La Audiencia Provincial de Palma ha concedido la libertad provisional al joven de 20 años que el pasado 8 de agosto atropelló al músico mallorquín Jaime Anglada (52 años) en la avenida Joan Miró de Palma, dándose a la fuga tras el impacto.
El juez ha fijado una fianza de 5.000 euros, que permitirá al acusado abandonar la prisión en cuanto sea consignada en el juzgado. El conductor, que circulaba en estado de embriaguez y realizó un cambio de sentido en una zona no habilitada, impactó contra la Vespa en la que viajaba Anglada, provocándole un fuerte golpe en la cabeza.
El artista, que llevaba casco tipo Jet, salió despedido y quedó tendido en el asfalto. Testigos presenciales relataron que el joven no prestó auxilio y abandonó la escena a toda prisa.
El cantante Jaime Anglada en una imagen de archivo.
Gracias a la rápida actuación de varios jóvenes que fotografiaron la matrícula del vehículo, la Policía Local pudo localizar al sospechoso horas después en su domicilio.
En el momento de la detención, el joven presentaba síntomas evidentes de haber consumido alcohol y duplicaba la tasa máxima permitida. Está acusado de omisión del deber de socorro, lesiones por imprudencia grave y conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
Mientras tanto, el estado de salud de Jaime Anglada ha mostrado una evolución positiva. Tras permanecer diez días en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario de Son Espases, el cantante fue trasladado a planta el pasado 18 de agosto.
Según ha confirmado su amigo Julián Aguirre en el programa Y ahora Sonsoles,"se está recuperando bastante bien, dentro de la gravedad de lo sucedido, y no hay que lamentar cosas mayores".
La noticia más esperanzadora es que no se ha producido el daño cerebral que inicialmente se temía, lo que permite a los médicos mantener un pronóstico favorable. No obstante, la familia ha pedido que se limiten las visitas para garantizar la tranquilidad del artista en esta fase delicada de recuperación.
Varias operaciones
La primera operación tuvo lugar el 13 de agosto, apenas cinco días después del accidente. Anglada fue intervenido de urgencia para reparar una fractura de cadera que comprometía su movilidad y estabilidad. Durante la cirugía, los médicos colocaron placas en la pelvis y recolocaron la cabeza del fémur.
La intervención fue considerada un éxito y permitió estabilizar al paciente, que en ese momento permanecía sedado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Universitario de Son Espases.
En los primeros días tras el atropello, los médicos también se vieron obligados a extirparle el bazo, una operación de urgencia que se realizó para evitar complicaciones hemorrágicas internas.
Esta intervención fue crítica para garantizar la supervivencia del cantante, que llegó al hospital con un traumatismo craneoencefálico severo y múltiples lesiones en costillas, muñecas y mandíbula.
Tras superar la fase más crítica, Anglada fue sometido a nuevas operaciones para reparar fracturas en la mandíbula y la muñeca. Estas intervenciones, realizadas en días posteriores, requirieron la colocación de placas para unir los huesos dañados.
Aunque menos graves que las anteriores, fueron esenciales para recuperar funciones básicas como la alimentación, el habla y la movilidad de las extremidades superiores. Después de diez días en la UCI, el músico fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intermedios y, finalmente, a planta el pasado 18 de agosto.
