Rafa Nadal (39 años) y Xisca Perelló (37) atraviesan uno de los momentos más felices de su vida. El extenista y su mujer acaban de dar la bienvenida a su segundo hijo en común. Se trata de un niño con el que aumentan su familia de tres miembros, y con cuya llegada dan un hermanito de juegos a Rafael, su primogénito, de 2 años y 10 meses.
El pequeño ha recibido el nombre de Miquel, según adelanta Europa Press, un homenaje muy especial al padre de Mery, quien falleció en abril de 2023 a los 63 años tras una larga enfermedad.
La elección del nombre pone de manifiesto el profundo cariño y recuerdo que mantienen hacia él, sobre todo en esta etapa feliz para ambos, en la que el jugador, retirado del deporte profesional, puede dedicarse plenamente a su papel de padre.
Rafa Nadal, en su última aparición pública, en la recepción que ofrecieron los Reyes en el palacio de Marivent, en Mallorca.
En las últimas semanas, todo apuntaba a que el alumbramiento del bebé sería algo inminente. Mery Perelló, más conocida como Xisca, fue la gran ausente el pasado lunes 1 de agosto en la recepción de los Reyes, Felipe VI (57) y Letizia (52) y sus hijas, la princesa Leonor (19) y la infanta Sofía (18), a las autoridades baleares en el Palacio de Marivent.
En aquella cita en su isla natal, donde estuvo acompañado por el exjugador de baloncesto Rudy Fernández (40) y su mujer, la modelo Helen Lindes (43), el exjugador acudió en solitario.
Apenas tres días después, la mallorquina daba a luz. El retoño ha nacido el pasado jueves, 7 de agosto, en el Hospital Quirónsalud Palmaplanas, en Palma de Mallorca.
El nacimiento, cuya noticia ha sido adelantada por La Razón, se ha producido en el mismo centro sanitario donde, el 8 de octubre de 2022, nació su hijo mayor, Rafael.
Xisca Perelló, embarazada y con su hijo Rafael en el tributo a Rafa Nadal en Roland Garros, en París, el pasado mes de mayo.
Según fuentes cercanas a la familia, tanto la madre como el recién nacido se encuentran en perfecto estado y podrían recibir el alta este mismo sábado para regresar juntos a su hogar en Manacor.
El anuncio de que esperaban su segundo hijo se conoció el pasado mes de febrero, cuando varios medios se hicieron eco de unas imágenes captadas en Mallorca en las que Xisca lucía una incipiente barriga.
Sin anuncio 'oficial' de su embarazo
Entonces, la pareja no hizo un anuncio oficial. La confirmación llegó a través de fuentes cercanas que deslizaron que el embarazo transcurría con normalidad.
La llegada de este nuevo miembro de la familia Nadal-Perelló supone la consolidación de un proyecto personal que comenzó hace más de tres años, cuando la pareja se dio el “sí, quiero” en una ceremonia íntima celebrada el 19 de octubre de 2019 en el castillo de Sa Fortalesa, en Pollença, uno de los enclaves más exclusivos y discretos de Mallorca.
Una familia de cuatro
En octubre de 2022 nació Rafael, su primer hijo, un acontecimiento que supuso un antes y un después para la pareja. Nadal, que en aquel momento se encontraba disputando el circuito profesional, no dudó en reorganizar su calendario para estar presente en los primeros días de vida de su hijo.
Rafa Nadal y su mujer, Xisca Perelló, en París, en junio de 2022.
“Es un cambio importante en nuestras vidas”, reconocía el deportista meses después en una entrevista, subrayando que la paternidad le había aportado “nuevas prioridades”.
Última vez juntos
La última aparición pública de Nadal y Perelló juntos antes del nacimiento de su segundo hijo tuvo lugar a mediados de julio, durante una cena con amigos en un conocido restaurante de Portocristo.
En las imágenes, difundidas por la prensa local, se les veía relajados y sonrientes, disfrutando de una velada en la que Xisca ya mostraba un avanzado estado de gestación.
Otra de las recientes apariciones públicas de Xisca, visiblemente embarazada, tuvo lugar el pasado mes de mayo en París, en el emotivo homenaje que se rindió al jugador en Roland Garros.
Nadal, retirado temporalmente de la competición para recuperarse de sus lesiones, ha podido acompañar de cerca todo el proceso, algo que él mismo ha calificado en más de una ocasión como “un regalo”.
