Después de cinco años de relación, Lucía Ruiz Lafita y Maxi Reiter se han dado el ‘sí, quiero’. La chef y fundadora de Delirium by Lucía y el empresario austriaco se convirtieron en marido y mujer este sábado, 12 de julio, en Madrid, tras un lustro juntos. Se conocieron en una aplicación para ligar y, desde entonces, no se han separado.
La chef, que presume de haber servido almuerzos y cenas para la familia Borbón e Isabel Preysler (74), y de haber organizado eventos para Cristiano Ronaldo (40) y Georgina Rodríguez (31), contrajo matrimonio el pasado fin de semana en Madrid.
Tras una pedida de mano idílica, bajo la escultura de Chillida, con una carta que Lucía solo podía abrir ese día y un anillo elegido con la ayuda de su mejor amiga, la pareja ha logrado convertirse en matrimonio. Este martes, 15 de julio, se han podido ver las primeras imágenes de los recién casados durante la boda y la preboda, celebradas el pasado fin de semana.
Lucía Ruiz Lafita y Maxi Reiter tras convertirse en matrimonio.
Aunque ya se habían casado un mes antes en Austria, en una ceremonia civil a orillas de un lago, vestidos con los tradicionales trajes tiroleses, la pareja ha decidido sellar su amor también en una ceremonia religiosa, esta vez en España, en la Basílica de San Francisco el Grande, el mismo templo donde se casaron los abuelos de la novia.
Para esta ocasión tan especial, Lucía confió en una creación de Sol Prada, de la firma T.ba, confeccionada en gasa de seda y organza, con una parte superior encorsetada y bordados Lunéville añadidos a última hora. La propia novia lo definió como "clásico y atemporal", aunque lo cierto es que el diseño le sentaba como un guante.
Lucía Ruiz Lafita llegando a la Basílica con su padre del brazo.
Además, Ruiz Lafita lució un collar de diamantes amarillos -propiedad de su madre- a modo de diadema, y apostó por un look natural y elegante: recogido para la ceremonia y semirrecogido para la fiesta posterior. También eligió unos zapatos de tacón sencillos, unos salones clásicos de Roger Vivier, los mismos que usó en la boda civil en Austria.
En cuanto al novio, en las imágenes se le ve luciendo un chaqué azul noche, con chaleco amarillo y corbata verde con motivos azules, que combinaban a la perfección con su tono de piel. Ambos forman el tándem perfecto, algo que las imágenes confirman sin lugar a dudas.
Durante la boda, los invitados tuvieron un gran protagonismo. Colores vibrantes, tejidos vaporosos y estampados divertidos fueron la nota dominante entre los asistentes. Pero, sin duda, uno de los momentos más simpáticos se produjo cuando los amigos del novio posaron juntos luciendo chalecos de distintos colores, una divertida estampa que se pudo apreciar a las puertas de la ceremonia religiosa.
Los amigos de los novios con chalecos diferentes en la boda de Lucía Ruiz Lafita y Maxi Reiter.
Tonos azules, pastel y violetas destacaron entre los looks, junto a vestidos de inspiración española, con flecos y mucha frescura, que marcaron la pauta en una calurosa tarde de verano en la capital, entre la mayoría de los invitados al enlace de la chef y el empresario.
Más tarde tuvo lugar la celebración, en la finca familiar Las Latas, situada en El Escorial, transformada en un auténtico "Jardín del Edén" por Atípica, con frutas, candelabros y flores colgantes. El catering, a cargo de El Mentidero de la Villa, ofreció puestos temáticos con guiños gastronómicos a los dos países de los novios, mientras que el postre puso la guinda al pastel: estaba preparado por la propia novia y su equipo.
Algunas de las invitadas a la boda de Lucía Ruiz Lafita y Maxi Reiter.
La preboda en Madrid
La celebración de los novios comenzó el día antes, el pasado viernes 11 de julio, con una pequeña reunión junto a algunos de los invitados al enlace. Tuvo lugar en el Nuevo Club de Madrid, un espacio castizo y acogedor que hizo sentir a los asistentes como en su propia casa.
Fue la propia chef, a través de sus redes sociales, quien se encargó de contar cómo había sido la fiesta. Las mesas estaban decoradas con velas de albahaca y ruibarbo de Delirium, y con centros de frutas de temporada de Elena Súarez & Co. Además, un grupo de jazz amenizó la velada, en la que se sirvió una tarta muy especial: un milhojas con crema de vainilla de Madagascar y frutos rojos, al estilo de las bodas italianas. Un detalle que hizo única la noche de preboda para los novios.
Los novios a su llegada a la preboda en Madrid.
Antes de entrar a la preboda, los propios novios hicieron un pequeño posado a las afueras del club madrileño. Lucía lucía un diseño blanco de corte midi, con escote en V y tirantes anchos, que combinó con unas sandalias plateadas de tacón sensato y un pequeño bolso a juego. Por su parte, Maxi Reiter vistió un traje sencillo en color oscuro, con camisa blanca y corbata azul cielo. Lo más simpático de la imagen es que él cargaba con dos cajas, aparentemente de contenido frágil, ya que en ellas podía leerse la frase: "mantener en posición vertical".
Sin duda, una noche que dio el pistoletazo de salida a unos días en los que la fiesta, la celebración y el amor se respiraban en cada poro de la familia y los amigos de Lucía Ruiz Lafita y Maxi Reiter. Un enlace que quedará para el recuerdo y grabado en sus corazones.