Hace unos días, Cristina Pedroche (36 años), con absoluta normalidad y naturalidad, compartió con sus seguidores de Instagram, y con los espectadores de Zapeando, que está instalada en casa de sus padres, en el barrio de Vallecas, en Madrid, junto a su hija, Laia. De Dabiz Muñoz (45), ni rastro. Tampoco lo incluyó en sus explicaciones.
Un gesto que, rápidamente, fue interpretado como que pudiera haber una fuerte crisis de pareja, en el seno de uno de los matrimonios más sólidos del panorama nacional. Ella misma le imprimió, días después, sentido del humor a este alud de comentarios. "Como ahora dicen que estoy soltera...", deslizó en el programa donde colabora.
¿Qué hay de verdad? ¡HOLA! dio el avance y EL ESPAÑOL amplía datos. No hay crisis; tan sólo una mudanza, un cambio de casa. Y en esa transición han decidido separarse unos días a nivel físico. A este periódico se habla de una decisión conjunta de pareja: así ella pasa más tiempo con sus padres, Domi y Paco, y él no descuida su trabajo en DiverXO.
Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz en una imagen de sus redes sociales.
No hay de qué preocuparse, es el mensaje que se traslada desde el entorno televisivo de Pedroche. Está todo bien. Se insiste en la cuestión práctica. Dabiz y Cristina se ven todos los días; o bien ella va al restaurante o él a casa de sus suegros. Él, según confían a este medio, está instalado en el hotel NH Eurobuilding, donde está DiverXO.
Esas visitas existen, otra cosa es que no sean inmortalizadas por los paparazzi. EL ESPAÑOL puede confirmar, además, que él acude diariamente a su puesto de trabajo, siempre y cuando sus viajes y su agenda se lo permiten.
"Están igual de bien que siempre", se incide. El matrimonio se muda de casa en la urbanización La Finca. Están desalojando y desean verse instalados en su nuevo hogar antes del verano. No ha podido saber este periódico, de momento, si Cristina y Dabiz se cambian de casa, pero siguen viviendo en La Finca o también estrenan urbanización.
Sea como fuere, lo que es un hecho es que la pareja tiene ahora mismo sus vidas, como toda persona que se muda, "patas arriba". Estos días, pese al estrés, están siendo fantásticos para Cristina, pues, como ella misma ha contado, está pudiendo rememorar pasajes del pasado en su habitación de niña. También da paseos por el barrio y destaca el cariño que recibe.
Pedroche y Muñoz, besándose.
Ella siempre se ha sentido orgullosa de su infancia y adolescencia en Vallecas. La persona con la que charla este medio asegura que estos días, además, están sirviendo para que los abuelos de Laia puedan disfrutar de la pequeña de la casa. Y Pedroche se está dejando mimar por sus padres, en este segundo embarazo.
Fue hace alrededor de cinco días cuando surgieron algunas especulaciones después de que compartiera una fotografía en la que se podía ver la que fue su antigua habitación en la casa de sus padres.
En la fotografía, la presentadora aparece sonriente, tumbada sobre la cama. Junto a su instantánea destaca unas líneas: "No me acordaba de la luz tan chula que entra por la ventana de mi habitación de siempre". Y añadía: "Volver a dormir en mi habitación de la casa de mis padres está siendo interesante".
La emblemática presentadora de las Campanadas aprovechó su espacio en La Sexta para hablar de este tiempo en casa de sus padres: "Está siendo muy social, muy bien todo. Pero se ha reducido todo mucho, ya no tengo momentos para mí sola", comentó el pasado jueves, 20 de marzo. "Me siento que nunca he salido del barrio. Puedes irte del barrio, pero el barrio nunca se va de ti".
Segundo hijo y polémica
Si alguien maneja las redes sociales y la expectación y el interés mediático con gran maestría, ésa es Cristina Pedroche. Todo lo que hace se convierte en noticia, quiera ella o no. Sus vestidos de Nochevieja de cada año son sólo un ejemplo, pero no es el único. Cuando anunció su segundo embarazo, también vino envuelto en intriga.
El 30 de diciembre de 2024 se hizo público que Dabiz y Cristina serían padres de nuevo, tras la llegada de su primogénita, Laia, el 14 de julio de 2023. Una excelsa y feliz noticia que vio la luz a escasas horas de que Pedroche diera las Campanadas de Fin de Año desde la Puerta del Sol.