El pasado lunes, 27 de enero, Anabel Pantoja (38 años) y David Rodríguez (26) acudieron a declarar al juzgado tras ser investigados como presuntos responsables de un delito de maltrato infantil. Su cita con la justicia tuvo lugar el mismo día en el que su hija recibió el alta, pero no trascendió hasta este jueves, 30 de enero, por un comunicado enviado por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias al que tuvo acceso EL ESPAÑOL.

Las diligencias investigan un posible delito de maltrato infantil, en vista del contenido del informe que el hospital envió el 17 de enero al juzgado de guardia de Las Palmas, cuyas conclusiones ha ratificado después un peritaje médico forense. "La investigación tiene como fin aclarar las causas y el mecanismo de producción de lesiones apreciadas en la bebé, en aras de proteger a ésta y considerando únicamente su interés superior", explica el comunicado. 

El juzgado de Las Palmas no ha acordado ninguna medida cautelar, ni en referencia a la situación personal de los investigados ni acerca de la tutela de la bebé. Sin embargo, la investigación continúa su curso como parte de un protocolo de actuación sanitaria para el abordaje de la violencia en la infancia y adolescencia. 

Tal y como ha podido saber este periódico, es un protocolo ordinario que se activa cuando los médicos encuentran una incoherencia entre las lesiones del paciente y el relato que se hace. Los hospitales son sensibles a este tipo de temas y deben activar el reglamento para evitar pecar de un delito de omisión. 

Insistir en que Anabel Pantoja y David Rodríguez no han sido acusados. Su cita con la justicia responde a un procedimiento establecido y que ya se ha hecho con anterioridad cuando se ha visto incoherencia entre las lesiones y el relato. El caso de Alma, la hija de Anabel, se está investigando. No hay ninguna resolución.

"Cualquier profesional de la salud, tanto de AP como Atención Hospitalaria (AH), puede detectar una situación de violencia en una persona menor y tiene el deber de comunicarlo (Ley 8/2021) activando el procedimiento que corresponda según la situación de violencia y la seguridad de la persona menor de edad", establece el protocolo de actuación sanitaria para el abordaje de la violencia en la infancia y adolescencia de Canarias. 

El mismo reglamento, añade: "Para la detección de una supuesta situación de violencia contamos con indicadores, que son aquellos signos y síntomas que presentan las personas menores y que nos deben alertar de una posible presencia de violencia".