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Desde el pasado domingo, 12 de enero, la prensa especializada en crónica social está en vilo, y con el pensamiento -y las oraciones- centradas en una niña de apenas dos meses: Alma Pantoja Rodríguez. El ingreso en un hospital de Gran Canaria de la hija de Anabel Pantoja (38 años) y David Rodríguez (26) preocupa sobremanera. 

El estado de salud de la pequeña ocupa horas de televisión, así como titulares en todos los medios de comunicación. Se está haciendo, pues, un seguimiento exhaustivo de la evolución de la menor. Toda la familia Pantoja, con Isabel Pantoja (68) a la cabeza, ni lo dudó: dejó atrás toda desavenencia y viajó a la isla para arropar a Anabel. 

Tocaba estar, abrazar, consolar y ayudar. Y eso han hecho todos. No sólo los reconocidos miembros de la saga; también grandes amigos y compañeros de profesión de Anabel. El cariño está siendo genuino y masivo: dicen quienes conocen a la influencer que está recibiendo lo que merece y lo que ella, previamente, ha dado. 

Anabel Pantoja y Merchi, abrazadas.

Las entradas y salidas de amigos y familiares del Hospital Universitario Materno Infantil de Las Palmas de Gran Canaria son constantes. Los padres de Alma, Anabel y David, no se despegan de su vera, y, al menos al cierre de este artículo, ni una sola imagen hay de esos progenitores que atraviesan el peor trance de su vida.

Amén de los padres del fisioterapeuta David Rodríguez, de los que no hay datos, existe una madre abnegada y sufridora, que no se separa de la vera de Anabel y de su nieta: Mercedes Bernal García, conocida cariñosamente por los suyos como Merchi. La madre de Anabel: su timón y férreo apoyo en estas horas tan decisivas y dolorosas. 

Merchi, natural de Sevilla, se trasladó a vivir, por un tiempo indefinido, a Gran Canaria cuando su hija estaba a punto de dar a luz. Ella, como es natural, quería estar junto a su Anabel en ese momento único e irrepetible: el del estreno en la maternidad.

Merchi, Anabel y David -junto a la pequeña de la casa- han formado un bellísimo equipo desde aquel excelso 23 de noviembre, cuando vino al mundo Alma. No cabía más felicidad. Todos despidieron 2024 unidos y abrazaron el año nuevo del mismo modo. Hasta que el 8 de enero la vida se oscureció para los Pantoja Bernal Rodríguez con la primera visita de la menor al hospital.