2024 es el año del literato y empresario Máximo Huerta (52 años). El escritor hará realidad y alumbrará su nuevo sueño literario, París despertaba tarde, el próximo 24 de enero de 2024. Ese día, el último proyecto del también presentador, al que tantas horas y desvelos le ha dedicado, saldrá a la venta y, según ha podido confirmar EL ESPAÑOL, Máximo no puede estar más ilusionado.
Él mismo ha confesado en alguna ocasión que la última es siempre la obra más importante en la carrera de todo escritor. Y si, encima, se concentran en una obra dos de los pasatiempos que más entusiasman a Huerta -la ciudad de París y los maravillosos años 20-, el éxito está asegurado.
Huerta ya ha comenzado la intensa y frenética promoción de la obra, que lo llevará no sólo por toda España, sino también lo hará viajar -de nuevo- a París, la ciudad en la que se desarrolla la novela y que, desde siempre, ha sido fuente de inspiración para Máximo. Ahí están, como dato, otros títulos como Una tienda en París.
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En medio de entrevistas promocionales y sesiones fotográficas, este periódico ha podido conocer cómo está viviendo Huerta este proyecto que lo catapultará, de seguro, a la lista de los escritores más leídos.
Tal y como explica alguien próximo a Huerta, que lo quiere bien, Máximo ha atendido sus primeros compromisos profesionales en la Comunidad Valenciana, próximos a su casa de Buñol y, sobre todo, a su progenitora. Ha conseguido cuadrar su agenda para, hasta la fecha, no alejarse en exceso de Clara y poder dormir en casa con ella.
Él mismo ha explicado en su red que se está desplazando a distintos municipios -como Requena- en su propio coche. Su nuevo día a día gira en torno a viajes, conceder entrevistas concertadas y retornar a su hogar.
Eso sí, el que fue rostro habitual de Telecinco es consciente de que esa especie de suerte va a acabar cuando tenga que emprender viajes más largos, como el que planea a París, con un grupo de periodistas para realizar una suerte de free tour por los rincones en los que se desarrolla su obra.
Máximo lo ha preparado todo al detalle para cuando su trabajo lo alejase de la mujer de su vida, su referente: Clara Hernández. Lo ha hecho posible gracias a su núcleo fiel. Personas de confianza que le facilitan su día a día. En lo que respecta a su bonito negocio, La librería de Doña Leo, EL ESPAÑOL ya se hizo eco hace un tiempo de que Máximo cuenta con una persona sobre la que recae toda su confianza, Nuria. Esta mujer se encarga del "merchandising y el envío de los libros". Y, de un tiempo a esta parte, se ha convertido en su otra mitad.
Por otro lado, lo concerniente a la parcela que más ocupa y preocupa a Máximo, el cuidado de su madre Clara, también está convenientemente resuelto. Confían a este periódico que Huerta cuenta con una persona que atiende, amorosamente, a su madre cuando el escritor no puede.
Cuando el trabajo lo mantiene lejos de su faceta de cuidador, Huerta no se despega del teléfono. La salud de Clara sigue delicada, aunque estable. Hace unos días, Máximo acompañó a su progenitora al centro médico donde se trata y, en el parking del mismo, tal y como reveló en Instagram, el escritor concedió una entrevista en relación a París despertaba tarde.
En otro orden de cosas, en Buñol, Máximo Huerta ha tejido una poderosa red de amistades. Personas de toda la vida y otras que han llegado en esta nueva etapa en casa. Hay un hombre muy especial para el comunicador, un buen amigo de esos que se crean en el colegio, en la infancia, y que los avatares de la vida no te arrebatan nunca. Se llama Chimo, es periodista y natural también de Buñol.
Como Máximo, este hombre salió del pueblo y terminó regresando al cabo del tiempo. Chimo estuvo, está y estará al lado de Máximo. Supo demostrar la calidad de su amistad en los momentos más convulsos de Huerta, como cuando renunció a su cartera como ministro de Cultura y Deporte, en 2018. En la muerte de su padre también estuvo presente y en la apertura de su librería. Chimo es amigo, pero, sobre todo, familia y un "hermano" para Máximo, ése que nunca tuvo.
"Yo, feliz por ver el resultado de este proceso que ha llevado con empeño e ilusión levantando una preciosa librería desde cero. Y feliz por llevarme mi primer libro que está en 'el mismísimo kilómetro cero de Buñol', como le gusta decir a un amigo. Os recomiendo que paséis por allí, con Maxi como anfitrión", posteó hace un tiempo Chimo, cuando La librería de Doña Leo abrió sus puertas.
El negocio, ya casi institución en Buñol, acaba de cumplir un año. Un aniversario que Máximo ha celebrado en redes: "Un año después de aquel precioso momento en el que abrimos la puerta azul, pienso en todos los que habéis venido hasta esta pequeña librería desde mil rincones de España. Os doy las gracias por el sueño. Por hacer de Doña Leo un hogar. Gracias".
La salud de Clara
En noviembre de 2023, la salud de Clara Hernández dio otro susto a su hijo. Máximo se vio obligado a cancelar a última hora varios compromisos laborales que tenía agendados. "Tiene la salud muy delicada", aseguró Máximo a EL ESPAÑOL, y añadió: "Lo urgente es lo importante. (...) He cancelado varios eventos".
Todo quedó en un segundo plano para el literato: lo prioritario era acompañar, estar, preocuparse. "Está mejor. Muchas gracias por el interés", aclaró Máximo. Desde 2020, Clara Hernández ha sufrido varios reveses de salud, tras ser diagnosticada de un tumor y, posteriormente, sufrir una dura caída por las escaleras que se complicó con el tiempo.
"Está muy mal, como muchas personas en este país. Por las mañanas soy su hermano, por las tardes soy su hijo", confesó, en enero de 2023, Máximo Huerta a Pablo Motos (58) en El Hormiguero, al hablar sobre los problemas que padece: tumores, cáncer y demencia.