Pedro Sánchez (47 años) y Begoña Gómez (44 años) han acudido este domingo a la cena de gala que reunía al G7 en el L'Hotel du Palais, en Biarritz. Un evento de altura donde se han encontrado los principales líderes políticos del panorama internacional y para el que la 'primera dama' española ha querido apostar fuerte.

La bilbaína bajaba del avión pisando sobre seguro con un vestido de fiesta Hannibal Laguna -diseñador venezolano, pero español de adopción. Un traje elegante con el que exponer su apuesta por la moda patria en un acto de tal repercusión internacional y con el que poder estar al nivel de primeras damas tan estilosas como Brigitte Macron (66) o Melania Trump (69). 

Begoña ha lucido un vestido de 2.900 euros para acudir a la cena de gala del G7.

Se trata del vestido de fiesta modelo Wellingtong de la colección hannibalissimo, que está realizado en mikado pique negro y decorado con un estampado floral con tonalidades claras, como el blanco y el rosa. Una combinación que generaba un contraste de colores ideal para una cena de gala de este tipo, en el que Begoña ha optado por una opción elegante con un estampado clásico. 

El corte, además, recuerda a los años dorados de Hollywood, en la década de los 50, cuando las estrellas de cine eran absolutos referentes de nuestra sociedad. Un patrón que, además, ha resaltado la esbelta figura de Begoña Gómez: escote de caja entallada, muy ceñida en la cintura, con una amplia falda con nesgas. 

La elección de Hannibal Laguna por parte la 'primera dama' no sueña extraña. Es un diseñador por el que siente un gran aprecio, hasta el punto de que en marzo de este año acudió a su desfile de novias en Madrid (el último de los eventos de moda donde la esposa de Pedro Sánchez ha estado presente). 

Un armario variado

Las pocas ocasiones en que Begoña Gómez ha ejercido como 'primera dama', cargo que realmente no existe en España, ha demostrado que a la hora de vestir no hay ninguna norma escrita. 

Desde modelos mucho más llamativos, pasando por auténticos clásicos donde no se arriesga, la esposa de Pedro Sánchez ha presumido de tener un armario de lo más variado. 

La primera vez que su estilismo llamó la atención de la prensa fue hace un año, durante el encuentro de las primeras damas en la Asamblea General de la ONU, en Nueva York. Para la ocasión, Begoña sacó la artillería pesada y apareció con un vestido de la colección Pre-Fall 2018 Belleza Capturada de Delpozo, valorado en 2.300 euros. 

Montaje Begoña Gómez junto al vestido de Delpozo.

Era una opción elegante con la que realizaba, además, toda una declaración de intenciones: con los colores de la pieza hacía un guiño a la bandera americana y a la primera dama estadounidense ya que Delpozo es una de sus firmas fetiches.

Este traje, sin embargo, también generó una gran polémica entre los usuarios que vieron en este vestido de 2.300 euros un derroche por parte de la 'primera dama'.

En su siguiente cumbre internacional demostró que la elegancia no siempre tiene que suponer gastos prohibitivos. En noviembre de ese año, durante la cumbre iberoamericana celebrada en Guatemala lució un traje de Roberto Verino de 295 euros. 

Begoña Gómez en un montaje de JALEOS junto al vestido de Roberto Verino.

Se trata de un vestido corto, a la altura de las rodillas, en color blanco marfil, de manga francesa, escote en pico y pliegues delanteros. Una opción "barata" teniendo en cuenta lo que suelen costar los modelos lucidos en este tipo de cumbres.

Dos vestidos que ofrecen una muestra del estilo de la 'primera dama', donde la elegancia y las firmas españolas son la única regla a seguir. 

[Más información: Begoña Gómez se pone 'austera': cambia el Delpozo de 2.300 euros por un Verino de 300]