Es el año de Belén Rueda (53 años) y ella lo sabe. Acaba de colocar en su niquelada y recién estrenada estantería de su casa de Marbella otro galardón más: su Premio Latino de Oro 2018 a la Mejor Actriz Latinoamericana, que recibió este fin de semana en la localidad costasoleña. Una carrera exitosa que se suma a la buena situación personal que está viviendo junto a su pareja Francis Malfatto (44), el motivo por el que ahora quiere echar raíces en esta ciudad. 

"Pues sí, estoy viviendo mi propia película de amor en Marbella. Hace un año, cuando mi hija Lucía estaba aquí de vacaciones y me llamó para que viniera unos días a verla, ¿quién me iba a decir que mi vida iba a dar un cambio y de unos días que venía para estar con ella ya me iba a quedar?", asegura la actriz. 

La actriz cariñosa con su pareja en la gala. Gtres.

"La vida no deja de sorprendernos y es precioso guiarnos por nuestro presente. Ahora ya tengo aquí hasta el cepillo de dientes. Prácticamente ya estoy casi viviendo en Marbella, aunque mis hijas están en Madrid, pero he decido venirme a residir en esta ciudad que tanto me da. Ya solo me falta traerme la ultima maleta", relata a este periódico sin que se le caiga ni un momento su limpia sonrisa.

Lo cierto es que su relación con Francis Malfatto está cada día más consolidada. La protagonista de Mar adentro pasa muy buenos ratos con los hijos de su pareja "y se llevan de maravilla". Los adolescentes no paraban de aplaudir a la actriz cuando recibió el premio en Marbella.

Las dos hijas de Belén, Lucía y Belén, también están encantadas con la nueva vida de su madre: "Hacemos muchas cosas juntas y yo que soy hiperactiva. No paro, así que ellas felices ahora que podemos realizar tantos deportes de mar como el surf que a Lucía, que es una surfera nata, le flipa".

Belén y Francis conforman una bonita pareja y allá donde van son el centro de todas las miradas. Así ocurrió también durante la gala de los Premiso Latinos, sobre todo cuando el uno al otro se cantaba entre besos que: "El amor es como un loco veneno".

Los dos se levantaron y bailaron animados con la cantante Lucrecia, que condujo el evento: "A mi me encanta, bailar, y el deporte no lo dejo nunca. Cuando me ubique aquí seguiré con el Yoga. Mi ocio es muy variado porque soy hiperactiva y no dejo de hacer cosas". Ya es habitual ver a Belén en los cines de La Cañada con su nueva familia disfrutando de películas que acaban de estrenar de ella. "Sí que es verdad que vamos mucho juntos... Es que el cine en familia sabe mejor".

Carrera exitosa

"Llevo un añito maravilloso, no dejo de tocar madera. ¡Virgencita que me quede como estoy!", comentaba bromeando a este periódico durante el certamen. La actriz, que bate récord en taquilla con El Pacto de David Victori (36), no para: de Marbella a Madrid y de Madrid a Marbella.

Belén Rueda durante la gala. Gtres.

Este mes de septiembre está rodando la película de Daniel Calparsoro (50), la adaptación de El silencio de la ciudad blanca. "Es una pasada, una película policíaca basada en la novela homónima de Eva García Sáenz (46) que va a dar mucho que hablar. Es una trilogía estupenda. Hemos grabado casi toda la historia en Vitoria y ahora nos quedan dos semanas más de rodaje en Madrid. Está quedando un peliculón maravilloso. Tenemos mucha ilusión en el estreno porque, si todo va bien, ¡rodaríamos otras dos más hasta cerrar la trilogía!", asegura la actriz.

La intérprete se ha impuesto en la gran pantalla en los últimos tiempos con una estética refinada, oscura y visceral que casi raya lo metafísico. Películas como La noche que mi madre mató a mi padre, El cuaderno de Sara, Perfectos desconocidos y ahora El pacto se van intercalando cada trimestre en las salas de cine con la aparición cruda y visceral de una Belén que apuesta por directores que estrenan su ópera prima.

"Es cierto. Los directores jóvenes siempre se me acercan. Hoy mismo, también en este certamen de premios latinos de noveles, apuestan por sus obras. Hay que considerarlos y ayudarles", precisa solidariamente la artista. De hecho ella, ya lo ha hecho en diferentes ocasiones, apostando por Oriol Paulo (43) en su primera película, El cuerpo, y con David Victori que ganó el primer Festival Mundial de Cortometrajes de YouTube con su premier El Pacto.

La artista echa la mirada atrás y no se lo cree: "Fíjate cómo ha pasado el tiempo. ¿Te acuerdas cuando grababa en el año 92 el Vips noche aquí en Marbella en el parque de la Constitución? ¡Madre mía, qué tiempos!". Al evocar el pasado parece como si los detalles estuvieran prendidos como un alfiler en el iris de Belén, ahora que se ha convertido en la autentica profeta del suspense en España.

¿Y el Goya, Belén? "Pues vamos a por todas. Y si me lo dan este año genial. Si no, ahí seguiremos como siempre apoyando el Cine Español", relata. La actriz cuenta ya con una estatuilla como Mejor Actriz Revelación en el 2005, pero este año, si las quinielas aciertan, sería la perfecta nominada a la Mejor Actriz 2018. Y como ella dice con su recién estrenado vestido rojo: "Karma es karma".

[Más información: La nueva cara de Belén Rueda cuesta 5.000 euros: esto es lo que se ha hecho]

Noticias relacionadas