Todo dinero es poco para cuidar la privacidad y favorecer el anonimato de los bebés de Enrique Iglesias (42 años) y Anna Kurnikova (36). Eso es lo que han debido pensar los nuevos padres de mellizos, que han decidido reformar por completo su mansión en Miami para convertirlo en un fuerte impenetrable a las miradas ajenas.

La renovación no ha sido precisamente barata: la factura, según publica TMZ haciendo referencia a la documentación de los permisos de construcción, asciende a 600.000 dólares. La cifra equivale, en euros, a algo más de 500.000 euros.

A finales del verano comenzaron las obras. Lo primero, un muro que rodeaba su mansión de casi cinco metros de alto. Ahora las fechas cuadran: la extenista tenista pasaba en esos momentos por su segundo trimestre de embarazo.

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Según los permisos de construcción a los que ha accedido el portal estadounidense de entretenimiento, la pareja también va a añadir una segunda residencia de dos plantas dentro de su propiedad.

Enrique Iglesias y Anna Kurnikova han pensado en otras medidas de seguridad para sus retoños -un niño y una niña, a los que pusieron por nombre Nicholas y Lucy, respectivamente-, como una barrera infantil para la piscina.

Tras más de 16 años de relación con el músico madrileño, la extenista dio a luz este pasado sábado a los mellizos. Los bebés son los primeros hijos de Kurnikova e Iglesias.

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