La guerra abierta que mantiene desde hace un tiempo Rocío Carrasco (39 años) con su ex marido Antonio David Flores (41) no ha hecho más que empezar. Este miércoles, la hija de la más grande acudía al Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Alcobendas, en Madrid, con el fin de ratificar la querella penal que interpuso a finales del año pasado contra su ex marido y padre de sus dos hijos.

Carrasco hacía acto de presencia pasadas las 10 de la mañana, con el rostro visiblemente desencajado. No es de extrañar, pues, que tuviera un semblante serio teniendo en cuenta que en la demanda que interpuso a su ex marido figuraba la queja de que "ha habido maltrato continuado desde el mismo momento del matrimonio hasta el día de hoy".

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Un día después, le tocará el turno al ex guardia civil, que esta vez ha visto cómo la madre de sus hijos le ponía contra las cuerdas llevándole hasta los tribunales.

Hace sólo unos días el juez, tras la petición de la Fiscalía, decidía que la querella se derivase al citado juzgado al considerar que los hechos demandados por Carrasco habían tenido lugar en el ámbito familiar durante el tiempo que duró el matrimonio de ambos y también posteriormente. Sin embargo, la querella interpuesta no fue presentada como violencia de género.