Entramos en la casa de Bimba Bosé de Madrid, que está en venta
La modelo convivió con su exmarido Diego Postigo y sus dos hijas en la vivienda de cuatro pisos situada en el madrileño barrio de El Viso. En sus paredes cuelgan dibujos de su primogénita, retratos de la maniquí creados por artistas de la pintura y elementos decorativos de su inseparable David Delfín. Está en venta.
En esta casa, situada en el madrileño barrio de El Viso, convivieron Diego Postigo, Bimba Bosé y sus dos hijas, Dora y June. De hecho, la modelo dio a luz a la segunda entre estas paredes.
Los hermanos Postigo, Bimba y el diseñador David Delfín comenzaron su andadura en lo que sería la firma Davidelfín en esta casa.
La casa tiene 300 metros cuadrados repartidos en cuatro alturas. El espacio de la foto pertenece a la última planta. Se trata de una suite con terraza y un gran baño abierto con dos lavabos, bañera y plato de ducha independientes.
El hogar de la modelo combina materiales industriales con la madera y el cristal. Sigue un estilo retro de los años 50 y apuesta por el blanco y los colores neutro en las paredes y mobiliario, poniendo el toque de color con los elementos decorativos.
En la primera planta se sitúa la cocina y la habitación para el servicio. El acero contrasta con la luminosidad del blanco y los colores vivos de algunos muebles.
La terraza que puede verse desde el exterior se encuentra en la segunda planta. La fachada gris esconde toda una explosión de color, personalidad y buen gusto en su interior, que caracterizaban también a su inquilina más popular.
La casa ha sido visitada y analizada por decenas de revistas de decoración y arquitectura.
La chimenea desde el exterior. Sus llamas pueden apreciarse en la segunda planta de la casa, en el centro del salón principal.
Uno de los accesos exteriores de la vivienda.
El terreno en el que está edificada la casa tiene 145 metros cuadrados, pero las cuatro alturas lo convierten en un espacio habitable de 300 metros cuadrados.
En la terraza los colores que predominan son el turquesa y el marrón de plantas que rodean la estancia.
A Bimba le gustaba traer recuerdos decorativos de los lugares a los que viajaba. En esta imagen vemos un buda muy colorido apoyado debajo de la ventana, en el lado izquierdo.
El sello de David Delfín está repartido por muchos rincones de la casa, ya sea en forma de dibujos, alfombras o diseños decorativos.
Los dibujos, graffitis y pinturas de las pequeñas de la casa decoran el gran salón de la vivienda.
La segunda planta es la estancia más lúdica de la casa, con la terraza, la chimenea y la sala de estar principal.
El cemento del techo podría parecer frío pero el resto de materiales y decoración lo convierten en un hogar cálido.
El rincón de más cómodo del salón.
Los colores neutros de los materiales y las paredes hacen que resalten las obras artísticas realizadas por los Postigo o David Delfín.
El aura positivo y calmado de Bimba queda plasmado en los rincones de su casa.
Ningún metro cuadrado del hogar está desaprovechado. Los bancos y sillas son necesarios en una casa en la que siempre había amigos que invitar.
En el último piso de la casa la luz que entra por los grandes ventanales y la pureza del blanco convierten la estancia en un lugar perfecto para el descanso.
Siendo modelo y con dos niñas pequeñas, es necesario tener tantos armarios y cajoneras como sea posible.
Con el blanco resaltan los detalles de color, como el cuadro y la lámpara.
Los detalles vintage son un plus en la casa. A la derecha de la imagen, un armario de médico antiguo.
A la izquierda de la imagen vemos un maniquí, en homenaje a Bimba. Las baldosas de la ducha acentúa el punto retro del carácter de la modelo.
Los espejos recuerdan a los de un cuento de hadas. Seguro que Dora y June jugaban frente a ellos.
El efecto óptico que producen las baldosas de la ducha.
Una de las habitaciones de la tercera planta. El oso de peluche encima de la balda y el tamaño de la cama nos hacen creer que podría ser una de las habitaciones de las niñas.
Habitación de una de las hijas de Bimba y Diego Postigo en tonos verdes.
Otra habitación de una de las hijas de Bimba, esta vez en tonos azules.
Uno de los rincones de la terraza del segundo piso.
El cuarto de las niñas tiene todos los detalles para el ocio, incluso la Play Station en el escritorio.
Uno de los baños de las habitaciones de las niñas.
